El formidable resultado obtenido en el partido de ida no se ha traducido en relajación en el seno del vestuario mallorquinista. Lejos de dar la eliminatoria por zanjada, Fernando Vázquezconsidera que tiene ante sí un nuevo test para evaluar hasta que punto el suyo es un grupo ganador. "Nos estamos jugando algo muy serio y no podemos permitirnos la relajación", aseguró ayer el técnico gallego, que sigue sosteniendo la tesis de que el Teplice es más fácilmente batible en el pequeño Stinadla Stadium que en Son Moix: "Afortunadamente les ganamos en su campo. Si llegamos a empatar o perder, mañana -hoy para el lector- habríamos tenido muchos problemas." declaró el entrenador gallego.
El nivel de juego del Teplice no es la única preocupación de Vàzquez, decidido a esperar hasta el último minuto para decidir si alinear o no a Germán Burgos. La lesión del guardameta argentino preocupa al entrenador, que por otra parte aprovechará el encuentro para dar entrada a otros jugadores. Nada amigo de facilitar el once titular a la prensa -todo lo contrario que su predecesor- Vázquez no tuvo reparos sin embargo en avanzar que Biagini dispondrá de minutos (posiblemente de salida) a lo largo del encuentro. La otra novedad podría ser la inclusión del media punta Adrian Djokaj como acompañante de Biagini en la delantera.