El Real Mallorca pisó ayer por primera vez el estadio Multiusos de Son Moix. Los hombres de Gómez se ejercitaron por espacio de una hora y media sobre el césped recién plantado y estrenaron el nuevo y amplio vestuario. La plantilla calificó las instalaciones de «modélicas» aunque la gran mayoría de ellos lamentaron que entre el campo y la grada se encuentre la pista de atletismo.
También el escaso tiempo transcurrido entre la finalización de la Universiada y la instalación del nuevo césped, ha motivado que el firme no haya enrraizado del todo por lo que todavía hay arena que sale a la superficie y dificulta el control del balón.
Al margen de estas dos circustancias los futbolistas elogiaron las dependencias del estadio. El Mallorca ha trabajado y está trabajando a destajo para acondicionar el recinto a las necesidades de un partido de fútbol. El sábado prácticamente todas las obras que se están llevando a cabo en las dependencias estarán finalizadas y el Mallorca dispondrá del campo más moderno, cómodo y amplio que pueda haber en el fútbol español.
Mario Gómez se refirió al estado del césped destacando que «el terreno de juego está bien. Le falta un poco para asentarse ya que se puso el pasto hace diez días. Pero el estadio es bárbaro». Miquel Soler comentó por su parte que «los campos con pista de atletismo no me han gustado nunca, no soy partidario de ello, son muy fríos y nadie puede cambiar esto. No sé este año como irá la cosa. El año pasado siendo líderes venían doce mil aficionados. No sé como irá este año si todo sigue igual con la pista en medio». Burgos calificaba el estadio de «muy lindo» destacando que «todavía el césped no está parejo porque lo tuvieron que levantar pero aquí se trabaja a pulmón para que todo esté listo», dijo.