EFE - ALEMANIA
El estadounidense Kenny Roberts (Suzuki) le ganó la partida al
español Àlex Crivillé (Honda) en el Gran Premio de Alemania de 500
c.c. que se disputó ayer en el circuito de Sachsenring y tras el
cual el piloto de Honda aumenta su ventaja al frente de la
clasificación provisional del mundial al verse beneficiado por el
abandono del japonés Tadayuki Okada (Honda), hasta ayer
segundo.
Sin los nervios que en otras ocasiones han traicionado a
Crivillé, éste fue poco a poco asentándose en la carrera y ganando
metros a sus rivales.
Por delante de él estaban un sólido líder como Kenny Roberts y un
nutrido grupo de ávidos pilotos en busca de la victoria: el también
estadounidense John Kocinski (Honda), los japoneses Norifumi Abe
(Yamaha) y Okada (Honda), el brasileño Àlex Barros (Honda) y el
también español Carlos Checa (Yamaha).
El ritmo impuesto por Roberts sólo lo pudo seguir Crivillé,
mientras Abe, Okada y Checa pugnaban por la tercera plaza del
podio.
Desde ahí hasta el final, Crivillé marcó de cerca a su rival
Roberts, pero la seguridad de éste en el trazado alemán le
aconsejó, tras un par de intentos de superarle, conformarse con una
segunda plaza que con la ausencia de Okada le pone con 47 puntos de
ventaja al frente del campeonato en lugar de los 41 con que llegó a
Sachsenring.
En 125 c.c. el italiano Marco Melandri (Honda) le ganó la partida a Emilio Alzamora (Honda) en la última vuelta del G.P. de Alemania, que ayer se disputó en el circuito de Sachsenring, pero la segunda plaza le permite al español reducir las diferencias en su lucha por el título con el japonés Masao Azuma (Honda) a sólo diez puntos.
Alzamora hizo una carrera muy inteligente pero al final el italiano fue el que se hizo con un triunfo que el español tuvo en las manos.