Con esta nueva modificación se adapta a las reformas introducidas en la Ley del Deporte a través de la Ley de Medidas Fiscales, Administrativas y de Orden Social, aprobada el pasado mes de diciembre. Según el Gobierno, con la reforma de la Ley del Deporte y este Real Decreto que la desarrolla, se establece para el deporte profesional un nuevo marco legal más ajustado a la realidad del sector y en sintonía con las normas que regulan la actividad económica de carácter general.
Para ello se liberaliza y aproxima el régimen jurídico de las
Sociedades Anónimas Deportivas al del resto de las sociedades
anónimas, facultando su salida a Bolsa a partir del 1 de enero del
2002; se favorece la trasparencia en la gestión, y se regulan los
mecanismos necesarios para velar por la pureza de competición y
para proteger los intereses públicos y de los potenciales
inversores. Para el desarrollo de este nuevo marco legal en el
deporte profesional se articulan, entre otras, las siguientes
medidas:
Se eliminan las restricciones que la Ley del Deporte establecía
respecto a la propiedad de acciones de las Sociedades Anónimas
Deportivas. A partir de ahora podrá ser titular de acciones de una
sociedad anónima deportiva toda persona física o jurídica de
cualquier país, con la única limitación del cumplimiento de la
legislación sobre inversiones extranjeras, mientras que la
legislación actual permitía únicamente esta posibilidad a personas
físicas o jurídicas españolas.
Se suprime la obligación de los administradores de las Sociedades Anónimas Deportivas de presentar avales para garantizar el cumplimiento de sus obligaciones.