El Sóller Club de Fútbol ha sido condenado a pagar más de 20 millones de pesetas, cifra que la plantilla del curso 97/98 reclamaba en concepto de mensualidades y de ficha, según informaron fuentes de la Federación Balear. Los futbolistas del conjunto que militaba en Segunda División B hace dos temporadas denunciaron a los distintos organismos federativos el impago de varias nóminas por parte de la entidad del valle y, tras consumarse el descenso de categoría del conjunto blanquiazul, decidieron llevar el tema a los tribunales ordinarios. Ahora, la sentencia obliga al club a abonar la cantidad solicitada por la plantilla.
Todo parece indicar que la entidad de Ca'n Maiol recurrirá el fallo pero, en caso de no prosperar, las medidas que se pueden aplicar (si el Sóller CF fuera declarado insolvente) son varias: embargo de taquillas, de subvenciones y la imposibilidad de ascender a una categoría nacional hasta que no pague sus deudas. Juan Sellés, actual presidente de la junta gestora, afirmaba ayer que desconocía la noticia y se mostraba cauto a la hora de valorar tal posibilidad. En principio, el club no está en condiciones de ejecutar este pago.
La historia se remonta a la etapa como presidente de Joan Piguillem, que decidió abandonar la entidad tras consumar el ascenso de categoría. Sin embargo, el mandatario se aplicó en la confección de la plantilla junto a Nico López y fichó a un amplio grueso de jugadores. Muchos cerraron los acuerdos sin firmar contratos y con la única promesa verbal del ex presidente.