Bàsquet Inca trasmitirá durante las próximas horas a la Federación Española de Baloncesto (FEB) su intención de mantener la franquicia LEB. El club ha logrado solventar parte de los problemas económicos que le han mantenido en vilo prácticamente desde que dio por finalizada la temporada 98/99, si bien hasta el lunes su decisión no cobrará oficialidad.
El presidente Rubert espera cerrar diversos acuerdos en el transcurso de la próxima semana, uno de ellos con la inmobiliaria Grup FER, cuyos responsables parecen dispuestos a involucrarse en el proyecto del Bàsquet Inca, bien como uno de los esponsors principales del equipo profesional o bien como miembro del club de patrocinadores que se ha creado.
Al margen de la respuesta del Grup FER, la ejecutiva del Bàsquet Inca aguarda la colaboración de otras empresas que le permitirían desarrollar una inversión cercana a los noventa millones de pesetas. Paralelamente a las gestiones encaminadas a lograr viabilidad económica para sentar las bases de un proyecto ambicioso, Rubert estima fundamental el convenio de colaboración que deben rubricar Real Mallorca y Bàsquet Inca. «Si queremos mejorar debemos aprender de las sociedades que han hecho bien las cosas. El Mallorca es ahora mismo el club más importante de baleares y su experiencia en el deporte profesional, en este caso el fútbol, puede ser muy beneficiosa para nosotros. Queremos dejar claro que no hemos pedido un duro al Mallorca, sólo asesoramiento y gestión económica», ha significado el mandatario.