ESPECIAL PARA UH
El italiano Iván Quaranta, del equipo Mobilvetta, logró el triunfo
más importante de su carrera al imponerse en la llegada masiva de
la undécima etapa del Giro 99 con final en la localidad natal de su
compatriota Pantani y con el también italiano Mario Cipollini como
máximo rival. Quaranta, que suma así dos etapas en la presente
edición de la Vuelta a Italia, ya que también fue el mejor en la
primera etapa, resumía brevemente la etapa al decir que esta en la
gloria al ganar en la casa de Pantani, el mejor corredor del
momento, al número uno en las llegadas masivas como es su
compatriota Mario Cipollini. La llegada masiva fue lo mejor de una
«minietapa», ya que tan sólo había 122 kilómetros entre Sansepolcro
y Cesenático, prácticamente llanos. No hubo movimiento debido al
control de varios equipos importantes, especialmente el Mercatone
Uno de Pantani y el ONCE Deutsche Bank de Jalabert bloquearon la
carrera.
En esta ocasión, en esa especie de homenaje a Pantani, al terminar la etapa en la puerta de la casa del «Pirata», ganador el pasado año del Giro y Tour entre otras muchas carreras, no hubo las esperadas aventuras de corredores perdidos en la general. Se fueron consumiendo los kilómetros sin sobresaltos debido al buen ritmo marcado por el líder Laurent Jalabert y los suyos, que no acusaron el madrugón del día al tener que pasar control médico, en esta ocasión por parte de los galenos de la Unión Ciclista Internacional (UCI).
Los diferentes premios de la jornada se fueron superando sin sobresaltos y prueba de ello es que los ataques brillaron por su ausencia hasta el kilómetro 82, donde estaba situado el intergiro. Un punto caliente que podía dar a Pantani la «maglia rosa» si conseguía superar al líder Jalabert. El italiano lo intentó, pero Jalabert le ganó con facilidad y le «hizo la Pascua» como comentaba en la llegada el ciclista francés, al estropearle la fiesta al lograr que no llegará de rosa a su ciudad natal. Jalabert consolidó el primer puesto al frente de la general al ser segundo en ese esprint, que le dio cuatro segundos con respecto a Pantani.