El Barcelona festejó ayer por cuadruplicado los éxitos conseguidos en la liga, tras reunir a unas cien mil personas en las calles de la Ciudad Condal con motivo de la celebración de los títulos conquistados por sus cuatro secciones profesionales -fútbol, baloncesto, balonmano y hockey- el año del Centenario.
Los jugadores, limitaron sus discursos desde el balcón del Ayuntamiento y de la Generalitat a corear con los aficionados el grito de 'campeones' y a vitorear al club y a Cataluña.
José Luis Núñez fue el que menos exultante se mostró y limitó casi todo su discurso a recordar las dificultades que debió superar el equipo de fútbol para hacerse con el triunfo en la liga y a denunciar que, en buena parte, se debió a la falta de apoyo que recibió. Núñez, quien recordaba así las críticas que recibió el técnico Louis van Gaal en un momento difícil de la temporada y la directiva por mantenerle en el cargo, llegó a manifestar que «hubo momentos en que el Barcelona no se sintió querido». Jordi Pujol, quien se saludó con Louis van Gaal tras la polémica que ambos protagonizaron, recordó que este es el año del Centenario del Barcelona y la carga histórica que ello conlleva.
La celebración del Barcelona comenzó en el Camp Nou, desde donde, a las 18:30 horas, cuatro autocares de dos pisos y sin techo se dirigieron hacia la Basílica de la Mercé, a la que ofrecieron los títulos conseguidos.