El español José María Olazábal, con una segunda tarjeta de 66 golpes, seis bajo par, que corresponden a otros tantos birdies sin fallo, se instaló en el liderato en solitario del Masters de Augusta tras completar el segundo recorrido del torneo, en el que un buen puñado de favoritos y de grandes nombres sufrieron los rigores del Augusta National.
Sus seis bajo par de le sitúan a Olazábal con 136 golpes en el total de las dos jornadas disputadas, ocho abajo, un golpe menos que el estadounidense Steve McCarron, y a tres de distancia del también norteamericano Lee Janzen y del australiano Greg Norman, quien volvió por sus fueros y dejó clara su intención de intentar ganar un torneo que se le ha negado persistentemente.
En cuanto a los principales favoritos, los estadounidenses Tiger Woods y David Duval, ambos se han descolgado de la cabeza de torneo y tienen francamente difícil volver a conectar con ella después del segundo recorrido. Woods, después de su triple bogey de la víspera, ayer sufrió para recuperar otros tres golpes perdidos en los hoyos once y doce -en éste con bola al agua- y acabar al par total -144-, mientras que Duval, en un sube y baja continuo y con un juego inconsistente, acabó la jornada con 74 golpes para 145 (+1), muy lejos del líder Olazábal.