Rubert quiere la paz con la Federació de Bàsquet de les Illes Balears (FBIB) y así se lo ha hecho saber al presidente Estarellas. El máximo mandatario del Bàsquet Inca ha instado a su homólogo de la FBIB a mantener un encuentro privado con el único objetivo de olvidar viejas rencillas y sentar las bases de una futura colaboración entre ambas instituciones, que durante las últimas temporadas han sufrido un distanciamiento importante, acentuado recientemente por el agrio intercambio dialéctico que han mantenido Joan Rubert y el propio Jaume Estarellas en los medios de comunicación.
«No es normal que el club más representativo del baloncesto mallorquín tenga problemas con su Federación. Creo que todos cometemos errores y la mejor fórmula para repararlos es el diálogo. La situación que se ha creado me parece un tanto absurda y considero que debatir sobre quien lanzó la primera piedra debe quedar relegada a un segundo plano. Bàsquet Inca y la Federació deben trabajar juntas, básicamente porque nuestro nexo común es el baloncesto», sostuvo Joan Rubert a la hora de argumentar su nuevo tratado de intenciones y su discurso de acercamiento a la FBIB.
Estarellas, que siempre ha calificado de inapropiada la política social del club inquense y ha llegado a tildar de prepotente a Rubert y a varios de sus directivos, parece dispuesto a desterrar el pasado.