Merecida victoria del Deportivo Alavés ante un decepcionante Mallorca, gracias a los goles del ariete Julio Salinas, que tras saltar al terreno de juego en el minuto 57 se convirtió en el revitalizador del equipo vitoriano, tras estrenarse como goleador desde que fichó por el conjunto vasco a primeros de enero.
El equipo de Hector Cúper, que llegaba a la capital alavesa con la etiqueta de equipo revelación de la liga y como segundo clasificado, acusó en exceso, sobre todo en la segunda parte, el desgaste realizado el pasado jueves en el encuentro de Recopa. Tras una primera parte bastante decepcionante en cuanto a juego por parte de uno y de otros, la entrada en el campo de Julio Salinas dio más profundidad al ataque del Alavés, que lanzó su primer remate entre los dos palos y consiguió el primer gol del delantero bilbaíno en el minuto 68.
El Alavés aumentó la cuenta con el segundo gol a falta de once minutos para el final de la confrontación. Un gravísimo error del portero argentino Carlos Roa, que quiso pasar el balón a un defensa y que fue cortado por Gerard, que centró al desmarcado Julio Salinas para que éste marcase a puerta vacía el 2-0 definitivo. Por tanto, triunfo inapelable del Alavés que mantiene intactas sus posibilidades de evitar el descenso directo tras los resultados de la jornada.