El suave frío de la costa de Dalmacia, donde el Varteks recibió una soberana paliza a manos del Zadar, dio paso a un clima mucho más hostil a medida que el autobús se acercaba a Varazdin, una pequeña capital de cincuenta mil habitantes que sirve de feudo al próximo rival del Mallorca en la Recopa. El Varteks estaba dispuesto a entonar un mea culpa realizando una larga sesión de entrenamiento, pero ni la nieve respeta a un equipo que ha encajado cinco goles. A la media hora, los jugadores tuvieron que suspender el trabajo por culpa de una nevada que dejó inutilizado el césped. Un contratiempo más para un club al que la Recopa le queda muy lejos aún porque este viernes se verá las caras con el Croatia, el equipo en el que juega Robert Prosinecki y que se ha colocado en la atalaya de la clasificación croata con un total de 44 puntos. El Croatia mandó un aviso a su próximo enemigo en forma de resultado: le ganó 0-2 al Zagreb.
Soplan vientos gélidos para el Varteks. El desastroso juego que realizó en defensa le ha costado bajar al quinto puesto de una tabla integrada por tan sólo doce equipos. Pero no todo está perdido porque todavía puede disputar la fase de ascenso, a la que tienen derecho los seis primeros de la clasificación.
Quien no ha perdido la sonrisa a raíz de los últimos acontecimientos es el presidente del club, Andrelko Herjavec, que está convencido de que su equipo podrá con el Mallorca. Al menos en su helado estadio. Los jugadores del Varteks disfrutarán hoy de jornada de descanso, para reanudar su plan de entrenamientos el miércoles con vistas al crucial encuentro de liga contra el líder.