El Mallorca B busca madurez en Alicante. Los de Nando Pons tratan de cerrar el primer ciclo de Liga con un triunfo que le permita afrontar la segunda vuelta con la garantía de la permanencia. Ante el Hércules, otro de los equipos instalados en la zona delicada de la tabla, el grupo balear busca prolongar su excelente racha de resultados (Rico Pérez, 17.00 horas).
Después de desalojar casi por completo la zona de enfermería "Braña y Tristán podrán jugar y tan sólo Douglas y Valencia siguen tocados" y la llegada de Fernando Ortiz, el técnico mallorquín podrá elegir pieza. La primera duda estriba en conocer la pareja atacante que formará ante los levantinos. Luque será fijo cayendo a la izquierda y el sevillano Tristán podría acompañarle. Ramón es la alternativa. La defensa puede repetir. Vaqueriza formaría por la derecha, Ivo por la izquierda y Porto-Potenzoni sería la pareja de centrales. Mientras, el centro del campo cuenta con excedente de inquilinos. El regreso de Braña puede precipitar la suplencia de Sastre o de Cámara. Maldonado y Valerón ocuparán los flancos. Nando Pons ha desplazado a Alicante 17 futbolistas, ya que el filial está a la espera de que llegue el tránsfer de Fernando Ortiz. Además, Potenzoni y Ramón se encuentran algo tocados y podrían resentirse.
El conjunto mallorquín ha encadenado tres semanas sin mácula (venció al Leganés y en Badajoz y empató ante Osasuna) y busca la confirmación ante un equipo que ha encadenado dos triunfos consecutivos en su propio terreno de juego.