Límite doce horas. El Real Mallorca apura los últimos instantes que permite la ley para fichar a un nuevo jugador y completar de esta forma la primera plantilla. El consejero delegado del club ha trabajado incesantemente estos últimos días para cerrar la operación y todo parece indicar que hoy viernes la entidad comunicará de forma oficial el nombre del futbolista que recalará en las filas mallorquinistas hasta el próximo mes de junio.
El técnico rojillo se refirió ayer a la posibilidad de fichar a un futbolista que complete la plantilla con la que trabaja en la actualidad. «Por ahora no hay ningún alta pero se está trabajando en eso. Nosotros queremos hacer alguna incorporación al margen de que se produzca o no alguna baja». Esta baja ya se ha producido ya que Rufete jugará hasta final de temporada en el conjunto del Málaga. «No sé si son grandes los problemas que pueden existir pero alguna expectativa de incorporación si que hay», señaló. Cúper fue sometido a un auténtico interrogatorio en la jornada de ayer por parte de los periodistas pero el entrenador fue en todo momento muy moderado y no ofreció datos concretos. «Se trata de un jugador polivalente» y de ahí no salió aunque sí confirmó que «Amavisca está descartado». Hoy por lo tanto el club dará a conocer el nombre del nuevo fichaje que se incorporará de inmediato a los entrenamientos.
Rufete jugará en el Málaga hasta final de
temporada
Rufete jugará hasta final de temporada en el conjunto del Málaga.
El futbolista ha decidido cambiar de club tras comprobar que aquí
no tiene oportunidades y que será muy difícil gozar de minutos en
los meses que restan de competición. El futbolista reconoció que
«me voy triste ya que no he podido gozar de minutos y la gente no
sabe lo que puedo dar de mi mismo. El Málaga ha mostrado interés
por mí y he aceptado jugar allí hasta final de temporada». Al
margen de esta circustancia ayer se produjo un hecho curiosos en
Son Bibiloni ya que los futbolistas no pudieron ducharse al
cortarse el suministro eléctrico. Los jugadores se marcharon con la
ropa de entrenamiento a sus domicilios ya que el agua no llegaba a
las duchas.