La armada balear funciona. El mallorquín Rudy Fernández (17 puntos, 6 rebotes y 3 asistencias) mostró su versión más solvente en su segunda aparición en Londres 2012. El jugador del Real Madrid destacó «la actitud del equipo a la hora de levantar el partido. Empezamos un poco ‘out', pero a medida que nos fuimos asentando sobre la pista, nos encontramos más cómodos y supimos llevar el partido a nuestro terreno. Cuando corremos, somos difíciles de batir. Es una de nuestras señas de identidad, pero hoy cabe descatar la actitud del equipo para darle la vuelta al partido». No en vano, el exterior formado en Sant Josep y el resto de sus compañeros siguen incidendo en que «lo que a estas alturas nos importa es ganar los partidos. Sabíamos que Australia ha crecido mucho, que no lo iba a poner fácil, y no se han rendido nunca, incluso yendo detrás en el marcador». Pese a ello, hizo autocrítica y dijo que «hay muchas cosas que mejorar. Contra equipos más potentes estos errores nos pueden dar problemas. Hay que romper antes los partidos, porque ahora viene lo más difícil de la primera fase». Y en referencia al golpe que se dio antes del descanso en la cabeza explicó que le pusieron «cuatro puntos, pero me encuentro bien. Quería sacar una pelota que se iba fuera y me he dado con la cámara».
Por su parte, el jugador mahonés Sergio Llull remarcó especialmente «el valor de la victoria ante un oponente como Australia» y el hecho de que «llevamos dos partidos y los dos los hemos ganado con relativa comodidad, aunque hemos tenido que emplearnos a fondo para lograr nuestro objetivo». Sobre el mal inicio del equipo español, reconoció que «nos costó meternos en el partido y ellos jugaban a un ritmo muy intenso. Con el paso de los minutos fuimos recuperando nuestras sensaciones y cuando nos metimos en el partido, todo fue más fácil». A nivel personal, Sergio dice sentirse «motivado por el hecho de estar compitiendo en unos Juegos Olímpicos y, poco a poco, me voy entonando, como todos. Es el inicio de la competición y vamos a ir creciendo a medida que avance, seguro, pero debemos mantener la máxima intensidad para que pasen cosas como las de hoy (por ayer)».