Michael Schumacher y su familia han sido protagonistas de un crudo episodio que les ha devuelto a la primera página de la actualidad meses después de la boda de su hija Gina, celebrada en Villa Yasmín, la blindada y espectacular mansión de Andratx en la que el heptacampeón del mundo de Fórmula Uno alemán pasa largas temporadas recuperándose del duro accidente que sufrió hace casi once años (finales de diciembre de 2013) en los Alpes, mientras esquiaba y sufrió una caída en la que se golpeó la cabeza.
Y es que quien fuera guardaespaldas personal del 'Kaiser', Marcus Fritsche, no se tomó bien su despido, como refiere el Daily Mail, que refiere el intento de extorsión y chantaje sufridos por la familia Schumacher. Quien fuera persona de confianza del expiloto se apropió de 1.500 fotografías, unos 200 vídeos e información médica del deportista, cuyo estado de salud y recuperación de guarda con extremo celo por parte de sus más allegados, que han preservado su intimidad de una manera extrema para evitar filtraciones. Por ejemplo, prohibieron la entrada de teléfonos móviles y dispositivos electrónicos en la boda de Gina Schumacher, momento en el que algunos asistentes trasladaron la presencia de Michael, aunque en un espacio apartado y con contacto apenas restringidos a unos pocos allegados.
Fristsche, junto a un amigo suyo y su hijo, habría desarrollado un plan para extorsionar a la familia del multicampeón mundial, pidiendo 15 millones de euros -unos 12 millones de libras- para evitar publicar ese material en Internet (a través de Dark Web), contactando incluso con los familiares para hacerles saber su proposición e intenciones.
Finalmente, la policía alemana aceleró sus investigaciones y procedió el pasado mes de junio a la detención de los acusados de extorsión, en un episodio que supone otro capítulo más dentro de la dura lucha de la familia Schumacher por hacer valer la intimidad del piloto, al que apenas unos pocos más allá de sus parientes más próximos han podido ver y visitar a lo largo de la última década, en la que Mallorca y Suiza han sido sus dos principales lugares de residencia, siendo el Port d'Andratx el punto en el que se ha escondido uno de los secretos mejor guardados del deporte mundial: el estado de salud de Michael Schumacher.