Semanas después de que lo hiciera la de ciclismo, la Federación Balear de Motociclismo (FBM) decidirá en las urnas quién será su presidente para los próximos cuatro años. Un censo de poco más de veinte clubes con derecho a voto como asambleístas de la territorial tendrá la palabra para decidir si opta por la continuidad del actual equipo gestor de la entidad o por un cambio en la presidencia de cara al ciclo que se avecina.
El actual presidente de la FBM, Rafa Cañellas, se presenta de nuevo a la reelección, aunque en esta ocasión tendrá competencia, repitiéndose de esta manera las elecciones que en 2014 ya vivió la territorial de motociclismo. Entonces, Pedro Mas venció a Catalina Tomás; ahora, aunque ya el 15 de enero de 2025, Cañellas se medirá al piloto Joan Pau Segura, que ha obtenido los avales necesarios para presentar candidatura firme.
Con dilatada experiencia en pruebas Off Road y títulos de campeón de España en su palmarés, Joan Pau Segura forma parte de la segunda generación de la saga que tiene como nexo de unión el Moto Club Fora Vila de Muro, presidido por su padre, Pep Segura. De su mano ha crecido una candidatura alternativa a la de Rafa Cañellas, quien llegó a la presidencia de la FBM en 2018, tras la súbita dimisión de Pedro Mas, para revalidar el cargo en 2020 y optar a la reelección de nuevo.
Las votaciones ya tienen fecha y hora. Serán el 15 de enero próximo, un miércoles, de 18 a 20 horas en las mesas habilitadas en Mallorca, Menorca, Ibiza y Formentera. En juego, la presidencia del motociclismo balear de 2025 a 2028. Todo un plebiscito en el que el deporte de las dos ruedas elegirá entre continuidad o relevo.