Lorenzo Fluxá ha arrancado oficialmente el motor de su Toyota Land Cruiser de 1996 para llegar el 5 de enero a la línea de salida del que será su segundo Dakar. En Arabia Saudí arranca ese día el raid más exigente y mediático del planeta, y con un equipo técnico 100 % mallorquín y sumando al catalán Xavi Ribas como copiloto, el empresario mallorquín presentó sus argumentos para ser una referencia en la modalidad Classic.
La sede de Projecte Home Baleares, cuyo logo ocupa un espacio notable dentro del coche de Fluxá y Ribas, fue el escenario de un acto que contó con la presencia del presidente de la entidad, Tomeu Català, quien les deseó todas las suertes y animó ante esta singladura por el desierto, «donde tendréis que superar muchos problemas y crisis, pero es un desafío bonito y tras él hay mucho tiempo de trabajo y lucha». Pedro Codes, director general de Atención a la Dependencia del Govern, y David Salom, director general de Deportes del Ajuntament de Palma, además de colaboradores y patrocinadores, también asistieron a la puesta de largo del coche que centrará las ilusiones mallorquinas en el Dakar 2024.
Fluxá y Ribas tendrán junto a ellos a un equipo técnico dirigido por David Pats y que completan Rafel Sastre, Miquel Verger y Felip Estarellas. Un camión y una caravana completan el engranaje del LJS Racing Team, que cuenta con el apoyo de Reserva Park, 226ERS o LJS Hoteles, entre otras firmas que apoyan al único mallorquín en liza en un Dakar que se disputa del 5 al 19 de enero próximos en Arabia Saudí, con más de 8.000 kilómetros de recorrido por delante en dos semanas y etapas maratonianas en condiciones imprevisibles.
Con la experiencia de Xavi Ribas como copiloto, con quien ha competido en Marruecos a modo de test, Lorenzo Fluxá da un paso al frente en su camino hacia 2025, una edición en la que tiene la ilusión de competir junto a su hija Lisabel, que no ha podido hacerlo este año por no tener ni la mayoría de edad ni el permiso para conducir, además de tener que cumplir con obligaciones académicas prioritarias en este momento. «Estamos más cerca de ese equipo 100 % mallorquín que tantas ganas tengo de hacer realidad», añadía Fluxá, quien avanzó que, salvo sorpresas, será realidad el próximo año.
David Pats será de nuevo el director técnico del LJS Racing Team, que completan Rafel Sastre, Miquel Verger y Felip Estarellas. Todos ellos tienen a punto el Toyota Land Cruiser con el dorsal 765 que, en unos días, viajará hasta Barcelona para pasar las verificaciones previas a su embarque con destino Arabia Saudí, donde espera estar a punto el 1 de enero próximo.
Destaca Fluxá el potencial de su copiloto en 2024, un año en el que el coche con el que competirán ha rebajado su peso en 300 kilos gracias a un chasis de fibra de carbono, además de perder 50 caballos de potencia, quedando en 250 -por los 300 del pasado año-, buscando una mayor fiabilidad, en palabras de David Pats, que junto a sus mecánicos escoltarán a Fluxá y Ribas desde el camión de asistencia y la autocaravana que completan el engranaje del LJS Racing Team para el Dakar.
«Este año vamos con un conocimiento mayor y la experiencia que no tuvimos en el pasado», aseguraba Fluxá en la sedede Projecte Home, a cuyos internos ofrecieron una charla posteriormente, además de permitirles ver el bautismo del coche. «Nos hemos preparado a conciencia, pero sabemos que todo puede cambiar en un segundo. Es un rally imprevisible, como el año pasado, que tuvimos frío, lluvia, calor...», proseguía el empresario isleño, que ya se ha puesto en 'modo Dakar', tras lograr un triunfo parcial en 2023 y superar obstáculos imprevisibles que no frenaron su pasión por la gran carrera del desierto.