El piloto español Marc Márquez (Repsol Honda) ha asegurado que su «apuesta por el neumático blando», que el año pasado le dio rédito en Phillip Island, «no ha merecido la pena» este sábado en la carrera del Gran Premio de Australia de MotoGP, y ha confesado que esperaba una prueba «más lenta».
«El año pasado el neumático blando nos llevó al podio, pero este año la apuesta no ha merecido la pena. Esperaba una carrera más lenta, pero enseguida Martín ha apretado al máximo y he sabido que iba a ser una carrera muy rápida», señaló en declaraciones facilitadas por su equipo.
Además, el de Cervera explicó cómo vivió la cita. «Al principio he disfrutado mucho de las diez vueltas con Bagnaia y Zarco, porque estábamos luchando mucho. Después he tenido que cambiar de táctica y centrarme en no cometer errores, ya que estaba sufriendo más con la duración de los neumáticos. Ahora esperamos a ver qué pasa con la situación mañana», finalizó.
Por su parte, su compañero Joan Mir no pudo terminar la carrera después de irse al suelo en la vuelta 11 tras un toque en la curva 4 con el italiano Luca Marini (Ducati). «Estoy decepcionado con lo de hoy, es otro día duro. Sólo he intentado hacer mi carrera, sin perjudicar a nadie, gestionando los neumáticos porque ya habéis visto lo que ha pasado al final de la carrera», indicó.
«Estábamos trabajando de la forma correcta según los datos. Marini ha intentado adelantarme, me ha tocado y me he caído tras perder la parte delantera. Estando detrás, la situación es más complicada ya que los pilotos se pelean mucho; hoy he sido víctima de ello. Pero así son las carreras. Veremos mañana», concluyó el balear.