El mallorquín Jorge Lorenzo y su Ducati Desmosedici GP18 literalmente arrasaron a sus rivales en la tercera y última jornada de entrenamientos de pretemporada en el circuito malasio de Sepang, al conseguir el tiempo por vuelta más rápido nunca dado en este trazado.
Lorenzo marcó a unas dos horas del final de la jornada, en el ecuador de su participación y en la que completó 42 giros, un nuevo récord de 1:58.830 en su vigésima primera vuelta, mejor incluso que el registro que en 2015 lograse su compatriota Marc Márquez (Repsol Honda RC 213 V) con 1:58.867.
El balear evidenció haber dado un paso más en su adaptación a la Desmosedici o, quizás, la moto se acerca ahora mucho más a las necesidades del triple campeón del mundo de MotoGP, y eso que antes de lograr su récord oficioso de la pista el de Palma de Mallorca se fue por los suelos en la última curva del trazado, sin consecuencias para su integridad física, pero obligado a regresar directamente a su taller para reparar los desperfectos.
En el momento del percance Jorge Lorenzo rodaba en vuelta rápida durante un simulacro de carrera y no tardó mucho en regresar al asfalto para conseguir su espectacular registro.