El español Maverick Viñales (Kalex) se hizo en propiedad con la segunda victoria consecutiva de las cuatro que ha logrado durante la temporada al imponerse en el Gran Premio de Malasia de Moto2 que se disputó en Sepang y en donde su compatriota Esteve «Tito» Rabat (Kalex) logró matemáticamente el título mundial.
Tanto Viñales como Rabat hicieron una carrera con un planteamiento muy inteligente, aunque obviamente cada uno tenía un objetivo distinto, pues Maverick sabía que Rabat arriesgaría lo justo para no cometer errores que le impidiesen proclamarse campeón del mundo, como así fue al final de la prueba.
Viñales logró la victoria y Rabat vio como su máximo rival por el título entraba justo delante de él y con ese resultado se proclamó por primera vez en su carrera deportiva campeón del mundo.
No falló en esta ocasión en la salida «Tito» Rabat, sabedor de la importancia de conseguir liderar la carrera desde el principio si quería sentenciar el título mundial y en cuanto se apagó el semáforo tomó la delantera perseguido por el alemán Sandro Cortese (Kalex), el finlandés Mika Kallio (Kalex) y el español Maverick Viñales (Kalex).
Desde la primera vuelta Rabat tiró como un «poseso» y ya en el segundo giro marcó la vuelta rápida de carrera, aunque por entonces Mika Kallio ya se encontraba tras su rebufo e intentaba aguantar el ritmo, pero en esa pelea se metió rápidamente Maverick Viñales, que buscaba repetir su victoria una semana antes en Australia.
No se amilanó por la presión «Tito» Rabat, que volvió a repetir vuelta rápida en el cuarto giro para intentar frenar las ganas de victoria de Viñales, quien se tuvo que pelear con el finlandés casi en cada curva, sabedor Kallio de que no le valía otro resultado más que la victoria para intentar frenar el título mundial de su compañero de escudería.
Ese ritmo impuesto por Rabat les permitió abrir ya en la cuarta vuelta un hueco respecto a sus rivales para dejar en cabeza un cuarteto en el que junto a ellos también se «metió» el suizo Dominique Aegerter (Suter), aunque duró muy poco y acabó rodando en solitario por delante de Sandro Cortese.
La respuesta de Kallio no se hizo esperar y en el quinto giro marcó su primera vuelta rápida para neutralizar los intentos del español de escaparse.
A cinco segundos del trío de cabeza se formó un segundo grupo encabezado por el español Julián Simón (Kalex) y formado por cuatro pilotos que luchó hasta el final por la sexta plaza.
Desde ese momento todo el interés de la carrera se centró en las posiciones del trío líder, aunque en realidad a «Tito» Rabat le valía cualquiera de las posiciones que ocupase en el mismo para conseguir su objetivo de proclamarse campeón del mundo de Moto2.
Kallio decidió pasar a la acción en el décimo giro, en el que adelantó por primera vez a Rabat por el interior de la curva, y también se vio superado poco después por Maverick Viñales.
Fue entonces cuando el líder del mundial giró la cabeza para mirar atrás en busca de más rivales y para conocer de primera mano la situación de carrera, en la que sólo el suizo Dominique Aegerter parecía en disposición de poder alcanzarlo.
Rabat dejó hacer a Kallio y Viñales en tanto que mantuvo a raya a Aegerter, sobre el que controló una distancia de aproximadamente un segundo en todo momento, pero que con el paso de las vueltas se fue incrementando hasta consolidar su tercer peldaño en el podio, que además le permitía celebrar el título mundial sobre el «cajón».
A cuatro vueltas del final Maverick Viñales decidió pasar a la acción y tras un par de intentos logró superar a Mika Kallio para lanzar su ataque definitivo en pos de la cuarta victoria de la temporada por delante del finlandés y de Rabat, que con esa tercera posición logró el anhelado título mundial.