El piloto mallorquín Jorge Lorenzo regresó a casa con su segundo título mundial de MotoGP en el bolsillo y con un billete para la leyenda ya sellado. Tras sellar el título hace seis días en Australia y después de cumplir con una serie de actos promocionales con Yamaha, el balear aterrizó en Barcelona con las miras puestas en el Gran Premio de la Comunitat Valenciana del próximo fin de semana. Lorenzo confesó que «este Campeonato ha sido más difícil porque la competencia estaba más cerca. En 2010 tuvimos más ventaja de puntos y a tres carreras del final pudimos ganar, mientras que aquí hemos tenido que esperar hasta la penúltima». El tetracampeón del mundo expuso que «el primer título en 250 y el primero en MotoGP fueron especiales, pero este último ha sido el más luchado y, por edad, lo he saboreado más», dijo.
Lorenzo apuntó que «tengo ganas de celebrar el título en Mallorca lo antes posible», y avanzó que «seguramente lo haga justo después de correr en Cheste». El campeón mallorquín aseguró que recibió «muchísimos mensajes, a través de Facebook y Twitter, de ánimo y felicitación de mallorquines y de todas las Balears, y me gustaría volver pronto a Mallorca a celebrarlo porque es mi Isla y donde más a gusto me puedo sentir», aseguró.
De Dani Pedrosa, comentó que «los dos nos merecíamos el Campeonato porque ha sido su mejor año desde que está en MotoGP, y yo he sido todavía más constante y por esa razón he ganado».
Jorge aseguró que «no me obsesiona la cantidad de títulos que pueda llegar a ganar», y recordó que «lo peor de la temporada fue la caída en Holanda, fue un duro golpe», y reiteró que «ganar dos mundiales en la máxima categoría para España es un gran orgullo, algo impensable hace 10 o 15 años».
Recién llegado a Espapa, Jorge admitió que «el regreso de Valentino Rossi con una moto más competitiva será positivo para ambos», y que la felicitación que más ilusión le hizo fue «la de Wayne Rainey, me dijo que había sido el más fuerte este año».
Sobre el cierre de la temporada, en Cheste, el 99 contó que «sólo he conseguido ahí una victoria y me gustaría mucho ganar», y avanzó que “correré sin presión, intentando demostrar que hemos sido los mejores de toda la temporada, pero imagino que también lo querrán hacer Pedrosa o Stoner, que se retira». Y de Marc Márquez, que la próxima temporada correrá acompañando a Pedrosa, Lorenzo pronosticó que «competirá pronto para podio y alcanzará pronto el nivel de Stoner».
Expectación
Más de un centenar de aficionados, miembros del club de fans de Jorge Lorenzo, recibieron al piloto ayer en el aeropuerto de Barcelona. Lorenzo firmó autógrafos y atendió a la prensa. Entre el numeroso público, destacaron dos monjas que animaron a Lorenzo. Las religiosas, que trabajan en el centro de menores San José de la Montaña de Barcelona, quisieron dar una alegría a sus pupilos y se desplazaron con ellos hasta el aeropuerto para corear al bicampeón. «No me esperaba tanta expectación, y se lo agradezco a mi club de fans y, en general, a todos los que han querido estar aquí porque me hacen sentir muy feliz», finalizó.