La décima posición en el Omnium de los Juegos Olímpicos de Tokio dejó un regusto a insuficiente para un Albert Torres que quería más y no renunciaba al diploma. Pasada página y ya centrados la Madison, repasó el 'pistard' de Ciutadella una prueba en la que «el objetivo estaba más adelante, era estar más arriba. En el scratch, si quieres luchar por las medallas, tienes que ponerte ya desde el inicio delante y ser lo más regular posible», explicaba el corredor del Movistar Team.
«He tenido un mal inicio. En el tempo, una vez acabada la carrera he visto que se me escapó un punto importante, porque había cogido vuelta, pero había varios corredores con los mismos puntos, y con uno más habría avanzado varias posiciones en la general», lamentó Torres, quien celebró que en la eliminación estuvo «en mi línea. Ha sido una carrera peligrosa, aunque por suerte no ha habido caídas, pues es una siempre nerviosa», proseguía en la 'pelousse' del Velódromo de Izu, escenario de la segunda participación del menorquín en unos Juegos.
Ya en la puntuación «había una guerra entre la lucha por las medallas, otra por los diplomas y gente que estaba lejos en la general que lo aprovechaba para arañar puntos», relataba Albert, quien no esconde que «si juegas bien tus cartas, pues coger vuelta. Así lo ha hecho Kluge y después he tenido suerte de unirme a Larsen y Stewart, que luchaba por la medalla. Nos hemos entendido, pero la vuelta no me ha servido de cara a la general», lamentó.
Así y todo, el ciclista balear tuvo claro en todo momento que tenía «ganas de probarlo, pero ahora tengo que recuperar. El sábado tenemos una gran oportunidad», reseñaba sobre la Madison, en la que aspiran a medalla. «(Sebastián) Mora está muy mentalizado, tenemos muchas ilusiones y esperanzas en esa prueba y ojalá que el sábado logremos un gran resultado. Pelear por las medallas sería algo extraordinario», advertía con un plus de motivación extra.
Subir al podio, por segunda vez para el ciclismo en pista balear en una Madison olímpica -tras la plata de Tauler y Llaneras en Pekín- es el reto. «Una medalla olímpica sería algo histórico para nosotros y para el deporte balear. Supondría cerrar el ciclo olímpico con premio. Esperemos tener un buen día», afirmaba Torres, quien tuvo palabras de elogio y felicitación para el también menorquín Joan Cardona, bronce en Finn.
«Fue una gran alegría lo de Joan, para los deportistas y para la gente de Menorca. Poder llevar el nombre de la Isla y ganar una medalla olímpica es algo histórico. Y lo vamos a intentar», concluía el de Ciutadella.