La jiennense Natalia Romero, eliminada en las semifinales de 800 metros con una marca de 2:01.52, declaró que se marcha «muy satisfecha» de su debut olímpico en Tokio.
Romero, de 33 años, había llegado a estos Juegos con la mejor marca de su vida (2:01.16) y afrontó las semifinales «sin presión» para realizar una buena carrera.
«Desde el principio tuvimos un ritmo rápido y exigente que he pagado al final y, además, no he podido adelantar a la atleta que me iba pegando codazos», declaró a TVE la corredora jienense, que emuló a Mayte Zúñiga y Mayte Martínez, las dos grandes del mediofondo español, al caer en unas semifinales olímpicas.
«Soy autoexigente, lo he dado absolutamente todo y me voy muy satisfecha de mi debut olímpico. Recuperé muy bien entre carrera y carrera y lo di todo en una semifinal rapidísima. Antes de venir no hubiera firmado lo que he hecho», concluyó.