Miquel Bennàssar Mojer ‘Molondro’ era un niño de apenas once años cuando el feudo del Poblense abrió sus puertas por última vez para albergar un partido de la Copa del Rey ante un rival de Primera División. Fue en la temporada 1976-77, en concreto el 27 de octubre de 1976, cuando aquel UD Salamanca dirigido por García Traid -esa temporada alcanzó las semifinales del torneo copero, siendo eliminado por el Athletic Club- se citó con el conjunto azulgrana que entrenaba Pérez Nieto en el partido de vuelta de la primera ronda. Los charros, que habían vencido 3-1 en la ida, cumplieron con el trámite con un empate (1-1) en un duelo que los seguidores más veteranos todavía recuerdan con cierta nostalgia.
Casi medio siglo después, el club presidido por Molondro -que el día 19 del presente mes cumple 60 años- está a las puertas de volver a vivir uno de esos encuentros que pasan de generación en generación.
El Poblense se medirá mañana miércoles en el Municipal (19.00 horas) al conjunto alicantino de La Nucía, también de Tercera División, con un billete para la primera ronda de la Copa del Rey en juego. Los de Óscar Troya, que la semana pasada dejaron en la cuneta a todo un Sabadell (líder del Grupo III de Segunda RFEF) en los penaltis, afrontan este cruce de cuartos de final de la Copa Federación con la ilusión de sa Pobla detrás. La localidad está volcada para empujar a los azulgrana al cuadro final de la competición del KO para repetir, medio siglo después, un duelo a cara o cruz ante un Primera División casi con total seguridad.
«Será el partido de nuestras vidas, el encuentro más importante en los últimos años, ya que el premio de esa clasificación es muy importante», subraya a Ultima Hora el presidente pobler, que recuerda aquel cruce ante el Salamanca. «Sí, yo era pequeño pero me acuerdo. Creo que también jugamos contra el Elche unos años después, que entonces estaba en Segunda. Ojalá podamos repetir la hazaña, pero antes está La Nucía, que será muy complicado», comenta Molondro, que inicia su decimoséptima temporada como presidente.
En el caso de superar a La Nucía, que la semana pasada dejó en la cuneta al Manacor en los octavos de esta competición, las posibilidades de cruzarse con un rival de la élite son muy elevadas, aunque también dependerá de los equipos modestos que accedan a esa ronda, que directamente quedarán emparejados con los del fútbol profesional.
El Poblense, que en los últimos 35 años apenas se ha asomado en una ocasión a Segunda B (temporada 20-21) sueña con volver a ser protagonista y colarse en la fiesta de la Copa. Para ello, debe eliminar al conjunto alicantino, que no ha comenzado con buen pie en Tercera, y acceder al torneo del K.O. vía Copa Federación... una competición que no es del agrado del presidente. «Para mí la Copa Federación es una pérdida de tiempo. Creo, y eso lo he puesto sobre la mesa, que hace falta un cambio de registro y que los equipos de Tercera División deberíamos jugar la Copa del Rey ya sea a través de eliminatorias previas o de forma directa».
Molondro tiene una confianza absoluta en Óscar Troya y en su equipo técnico. «Es un entrenador que lleva muchos años con nosotros, que está haciendo las cosas bien y para él también sería un premio tener la posibilidad de enfrentarse a un equipo de Primera División».
La directiva del Poblense quiere ver el mejor ambiente posible y calcula que unos 2.000 aficionados podrían asistir al duelo. Para ello ha fijado unos precios de 5 euros para los socios y 10 euros para los no socios. El premio que aparece en el horizonte es demasiado goloso. Un Primera División en sa Pobla casi 50 años después...