El colegiado mallorquín Busquets Ferrer se encuentra ante su primer fin de semana 'grande'. Y es que el árbitro del Comité Balear ha sido designado por primera vez para dirigir un encuentro del FC Barcelona en el estadio Lluís Companys, donde los hombres de Xavi Hernández recibirán al Alavés después del revés sufrido el pasado martes en la cuarta jornada de la Liga de Campeones al caer por la mínima ante el Shakhtar Donetsk.
En la temporada de su estreno en Primera División Mateu Busquets dirigirá su sexto encuentro de liga y lo hará en un choque sobre el que se posarán muchos focos. No en vano el trencilla mallorquín arbitrará por primera vez al FC Barcelona después y añadirá una nueva muesca a su historial después de haber dirigido en lo que llevamos de curso en Montilivi (Girona-Las Palmas), el Estadio Juegos del Mediterráneo (Almería-Valencia), el Coliseum (Getafe-Villarreal), el Sadar (Osasuna-Granada) y Vallecas (Rayo-Real Sociedad). Si había dirigido en cuatro ocasiones al filial azulgrana en su etapa de cinco años entre Segunda B y Primera Federación con el resultado de dos victorias culés y dos empates.
Busquets Ferrer, que a sus 30 años es el colegiado más joven de Primera División, presenta una gran trayectoria al alza teniendo en cuenta que se estrena en la máxima categoría del fútbol español tras una sola temporada en Segunda. Su balance en el presente curso tras cinco partidos de liga en Primera División es de dos triunfos locales y tres empates con una media de seis cartulinas amarillas por encuentro y en la clasificación del premio Guruceta que entrega el diario Marca al mejor colegiado se encuentra en la posición número 13 entre los 20 árbitros de Primera.
Hace 30 años que un colegiado mallorquín no dirige al FC Barcelona, ya que el último precedente es de la temporada 1992-93 en la que Riera Morro dirigió un choque en el Camp Nou frente al Logroñés en el que los azulgrana se impusieron por 3-0 con tantos de Julio Salinas, Begiristain y Bakero.