El presidente del Comité Técnico de Árbitros (CTA), Luis Medina Cantalejo, aseguró que «no hay ninguna evidencia, ni prueba que pueda decir que un árbitro es deshonesto» y explicó que ha trasladado al departamento de integridad la información recabada en la investigación interna relacionada con el caso Negreira.
«Quien tiene mayor interés en que esto se aclare y que si hay culpables se les castigue con el máximo rigor somos los árbitros, si ha habido algo imputable a personas que en su momento pertenecieron a esta casa y aprovechando su posición se han lucrado y han tenido actuaciones fuera del proceder del arbitraje español. ¿Pero todo esto qué tiene que ver con nosotros?. Se ha criminalizado, hay un clima social antiárbitros», dijo.
Medina Cantalejo insistió en que «el daño esta hecho» y que los árbitros tienen que seguir trabajando, seguir entrenándose, sacar adelante los partidos y «ponerse a disposición de las instituciones, tanto del departamento de integridad de la Federación, como de la Fiscalía o cualquier entidad que lo pida».
«Soy nieto, hijo y padre de árbitro. Ni yo soy un corrupto ni vosotros sois corruptos. Esto que ha pasado es una vergüenza y hay que limpiarla. Vamos a luchar hasta el final para que cada uno quede en su sitio», añadió Medina Cantalejo, que explicó que únicamente un árbitro, cuya identidad no desveló, no ha enviado la información que se le ha solicitado dentro de la investigación interna que llevan a cabo el CTA y la RFEF.
El presidente del CTA compareció este jueves junto al secretario general de la RFEF, Andreu Camps, en la Ciudad del Fútbol, en presencia de un amplio número de árbitros en activo y retirados, para informar sobre su actuación tras conocerse que la Fiscalía de Barcelona investiga a una empresa del exvicepresidente del comité José María Enríquez Negreira por un presunto delito de corrupción entre particulares, por unos pagos de 1,4 millones del Barcelona entre 2016 y 2018.
Medina explicó que al día siguiente de conocerse la investigación de la Fiscalía reunió a todos los árbitros y les solicitó que respondieran a una serie de preguntas, como si habían tenido contacto con Enríquez Negreira o su hijo antes de 2018 y después, y lamentó que ésto se filtrara a la prensa.
«Era el momento de dar la cara y de unión. Lamentablemente siempre hay alguien que prefiere posturas egoístas, personalistas, traidores y esa misma tarde se publicó a los medios. Al día siguiente todos mandaron el cuestionario menos uno. Se le llamó y a fecha de hoy no ha contestado», indicó, sin dar detalles sobre las respuestas recibidas y sin contestar a la pregunta de si el único que no ha respondido es el catalán Xavier Estrada Fernández, ahora árbitro VAR, que ha presentado una querella a título individual contra Enríquez Negreira y su hijo.
El presidente de los árbitros aclaró que durante la vicepresidencia de Enríquez Negreira en el CTA, entre 1994 y 2018, este no tenía ningún sueldo y sus competencias eran comunicar a los árbitros los grupos en los que iban, los ascensos y los descensos, y rechazó tajantemente haber recibido indicaciones para arbitrar en un sentido o en otro durante sus 11 años de carrera.
«Pongo la mano en el fuego por mis compañeros de entonces y los árbitros de ahora, si saliera algo que la justicia recaiga sobre ellos. También por (Victoriano) Sánchez Arminio (expresidente del CTA), él ha sido el presidente de muchos árbitros, si hubiera tenido la mínima sospecha le habría puesto en la calle. Está muy fastidiado, era su vicepresidente. Seremos malos, buenos o regulares, pero nunca algo así», añadió.
Medina Cantalejo señaló que Sánchez Arminio respaldó a los árbitros en el acto de este jueves, igual que su predecesor en el cargo, Carlos Velasco Carballo, que estuvo presente en la Ciudad del Fútbol, y respondió a una pregunta sobre la influencia que esta situación puede tener en los arbitrajes al Barcelona y el hecho de que al Barça no se le hayan pitado penaltis en contra durante dos años.
«Si no se han pitado será porque a juicio de los árbitros no los habría y punto pelota. Al Barcelona hay que seguir arbitrándole, esta noche mismo, y los que lo van a hacer van con la honestidad por bandera y a hacerlo lo mejor posible, aunque históricamente los árbitros han sido los chivos expiatorios. El otro día en un partido de prebenjamines escuché a un padre decir que había que hacer como el Barça ir comprando a los árbitros».
Tras la lectura de un manifiesto en defensa del colectivo por parte del árbitro murciano José María Sánchez Martínez, Medina Cantelejo, reiteró su deseo de que con la investigación «no haya ninguna duda». «Que se deje de especulaciones y se ponga en tela de juicio la honestidad de una persona sin ninguna prueba. Esta guerra no va con nosotros», concluyó.