El central alemán Antonio Rüdiger se sometió a unas pruebas que confirmaron que no sufre lesión ósea, tras el fuerte golpe sufrido ante el Shakhtar por el que le tuvieron que aplicar 20 puntos de sutura en la frente, y a la espera de crear una máscara para jugar con la zona protegida, no está de momento descartado para el clásico del domingo.
Los médicos del Real Madrid realizaron el estudio radiológico a Rüdiger en la mañana del miércoles, que según apuntan a EFE desde el club blanco, descartó que sufra lesión ósea por el fuerte impacto ante el portero Anatoli Trubin en la acción que dio el empate al conjunto blanco en el minuto 95 de su duelo ante el Shakhtar y la clasificación matemática a octavos del final. Se ha tomado medida del rostro de Rüdiger para crear con urgencia una máscara y que el alemán la pueda probar en los entrenamientos, antes de decidir su presencia en el duelo del domingo ante el Barcelona en el estadio Santiago Bernabéu. En su etapa en el Chelsea ya ha jugado con máscara.
El propio jugador alemán aseguró tras el encuentro que está «bien». «Lo que no te mata te hace más fuerte. Estoy bien. Gracias por todos los mensajes», escribió el futbolista en sus redes sociales junto a una foto saliendo del terreno de juego con sangre en la cabeza y en la camiseta.
De momento no está descartado aunque con la herida de 20 puntos reciente, se irá estudiando su evolución en los próximos días para que Carlo Ancelotti, en comunicación con el cuerpo médico y el jugador, tomen una decisión el sábado. Este miércoles, el jugador guardará reposo en su domicilio.