El agente de futbolistas Santos Márquez cumplirá cuatro años y un día de cárcel por engañar a su socio mallorquín y dejarle sin cobrar la comisión por el fichaje de Iker Casillas por el Oporto en 2014. El Tribunal Supremo ha confirmado de forma íntegra la condena que le impuso la Audiencia Provincial de Palma y que ratificó ya el TSJIB. La condena por estafa es ya firme y sin margen para que el acusado evite su cumplimiento.
Márquez tenía un acuerdo en vigor con la sociedad Mallorca Viva S.L. para desarrollar su actividad profesional. El empresario Jorge Sastre, defendido por el abogado Jaime Campaner, era su socio y quien aportaba el capital para que Márquez intermediara en el mercado de jugadores. En 2015, sin embargo, el acusado hizo creer a su socio que había interés en Casillas por parte de equipos de Estados Unidos y, a sus espaldas, contactó con el mánager del futbolista y se encargó de intermediar en el fichaje con el Oporto.
Se quedó con la comisión íntegra, cerca de 700.000 euros. El Supremo confirma que el acuerdo que tenía con Mallorca Viva le obligaba a ingresar en la sociedad esta cantidad y a repartirla con su socio. Descarta que pudiera trabajar en solitario a través de una sociedad que había constituido en paralelo para esquivar a su socio. Confirma íntegra la condena por estafa. Además deberá indemnizar a la víctima con más de 200.000 euros. La sentencia del Supremo ha sido notificada hoy a las partes. Ahora será remitida a la Audiencia Provincial de Palma que será la encargada de ejecutar la resolución y que, en los próximos días, dictará el auto que ordene a Santos Márquez entrar en la cárcel.