En un partido de tanta magnitud como el Atlético-Barcelona, casi nunca se han dirigido tanto las miradas a los banquillos; a Ronald Koeman, ante su final con el club azulgrana, y a Diego Simeone, aún frente al puzzle de encajar piezas de tanta dimensión en un solo bloque incontestable.
Cada uno, a su manera, se enfrentan este sábado a una encrucijada en el Wanda Metropolitano, con la repercusión que tendrá el triunfo, el empate o la derrota desde todas las perspectivas: la clasificación; la confianza, las dudas o las expectativas de los dos conjuntos; o el futuro de Koeman, aparentemente ya sentenciado.
Ya con siete jornadas de Liga -en el caso del Barcelona una menos- y dos de Liga de Campeones disputadas, ninguno de los dos convence, aunque el ruido que desprenden uno y otro club son opuestos: Simeone es el líder intocable del Atlético; Koeman sobrevive mientras intuye su despido.
Por si las malas noticias en el Barça fueran pocas, el club anunció la baja de Pedro González, ‘Pedri', a causa de una lesión muscular en el cuádriceps de la pierna izquierda tras haber reaparecido ante el Benfica el miércoles. Este contratiempo, sumado al pobre nivel que ofreció Sergi Roberto ante el Benfica, podría devolver la titularidad al canterano Gavi. La novedad en la convocatoria del Barça es Jordi Alba.
Mientras el Barcelona perdía 3-0 con el Benfica, el Atlético ganó el martes 1-2 en Milán, con los dos goles en los instantes finales, entre ellos el 1-1 de Griezmann, pero con una larga enumeración de matices, defectos y preocupaciones.
Ni fiable ni contundente ni agresivo, el Atlético es un colectivo en duda por ahora en esta campaña, agarrado a las individualidades, a los lapsus rivales y a los últimos minutos para ganar más partidos de los que ha merecido: cinco de los nueve duelos que ha disputado, en los que han coincidido todos esos factores.
Al Getafe y al Milan los remontó, no sin apuros, ya con superioridad numérica, con tantos en los instantes finales. Al Elche lo doblegó por un fallo, en Vitoria perdió con justicia y contra el Athletic y el Oporto empató a nada... Y pudo perder.
Debilidades
Ha recibido gol en contra primero en cinco de sus últimos siete choques (los otros dos acabaron 0-0); ha evidenciado una fragilidad defensiva desconocida; ha sufrido contra el repliegue rival, pero también contra la presión alta, tal y como lo desfiguró el pasado martes el Milan en el primer tiempo; y no crea ni la mitad de ocasiones que hace un año.
Y no se reconoce apenas cuando rememora su pasado reciente. A su reencuentro acude Simeone, que idea y proclama un cambio en ataque para contraponer a la nueva exigencia que percibe de sus oponentes, mientras insiste, aún sin éxito, en la conjunción milimétrica de todos los recursos de los que dispone, más que nunca en el Atlético. De Griezmann y De Paul con Joao Félix, Luis Suárez, Lemar, Koke...
Al atacante francés no se le espera en el once de este sábado. A los demás, sí. También a Jan Oblak, Mario Hermoso, José María Giménez, Marcos Llorente, Yannick Carrasco y Stefan Savic. Son baja Geoffrey Kondogbia, por ciclo de cinco tarjetas amarillas, y Matheus Cunha, por una lesión muscular. El resto están todos disponibles.