La Bundesliga ya tiene a sus equipos entrenando y espera retomar la acción a principios de mayo, siempre en contacto con las autoridades como explicó este miércoles el jefe de la liga alemana, Christian Seifert, para saber «cuándo» podrán devolver parte de la normalidad a la sociedad y comenzar a superar el coronavirus.
En una entrevista este miércoles al 'New York Times', Seifert habló de «cuanto antes terminemos, más flexibilidad habrá para las competiciones europeas». Los equipos alemanes han vuelto ya al trabajo, bajo estrictos protocolos para no dar más trabajo al sistema sanitario del país, el cual parece estar rindiendo.
Y es que Alemania, pese a un alto nivel de infectados, está entre los países con menos fallecidos. «Somos parte de la cultura del país, la gente anhela recuperar un poco de la vida normal y esa parte podría ser la Bundesliga. Apoyamos al gobierno y mantenemos contacto para saber cuándo será el momento de volver», dijo.
Lo que parece también claro es que la liga alemana, habitual de estadios llenos durante todo el curso, tendrá que terminarse a puerta cerrada, aunque eso sí lo haría para finales de junio, cuando muchas ligas quizá aún no han sido capaces de volver. Seifert no ocultó la repercusión económica de la crisis del COVID-19.
Entre otras cosas por la ausencia de público, los sponsor y distintos contratos. La situación es delicada sobre todo para muchos equipos de la segunda división alemana «en riesgo de quiebra». «No entiendo las discusiones en otros países con los jugadores. Aquí desde el principio se habló con ellos», dijo sobre las reducciones de salario que están tratando ahora en España o Inglaterra.