El Barcelona logró este jueves el pase a la final de la Supercopa femenina, al vencer en el estadio Helmántico de Salamanca al Atlético de Madrid (2-3) en un partido vibrante, que dominó el conjunto culé en la primera parte y que en la segunda se limitó a contemporizar el juego.
Las mallorquinas Mariona Caldentey y Patri Guijarro fueron titulares en la escuadra azulgrana y la segunda tuvo un papel protagonista al lograr el tanto que supuso el 1-1 a los 12 de juego después de que las rojiblancas se adelantaran en el minuto tres por mediación de Tonni Duggan.
Los primeros 45 minutos fueron brillantes por parte del equipo culé, que fue un bloque compacto, unido entre líneas y con una Oshoala que llevaba el peligro en cada una de sus acciones. Las azulgrana se marcharon al descanso 1-3 al descanso después de que Martens lograra el 1-2 en el 28 y Oshoala el tercero de las catalana en el minuto 42.
En la segunda parte, el nivel de juego por parte de las catalanas bajó, y con un Atlético que tuvo 20 minutos volcado al área del Barça y que, aunque redujo la diferencia de goles, apenas pudo llevar más peligro.
El Barcelona peleará el domingo a las 12:00 por el título ante la Real Sociedad, que dejó en la cuneta al Levante al imponerse por 1-0 con gol de Leire Baños.