El galés Gareth Bale se quedará en Madrid y no viajará a Yeda (Arabia Saudí) para reforzar a la plantilla de Zinedine Zidane en la final de la Supercopa, al no haber superado la enfermedad que le dejó fuera del torneo.
El técnico francés decidió que el futbolista permaneciera en España para completar la recuperación de la infección en el tracto respiratorio superior. Tras conversar con los médicos del club, el preparador francés optó porque el futbolista prosiguiera con su puesta a punto y evitarle, además, un traslado largo.
A pesar de la mejoría del galés Zidane no estaba convencido de la idea de hacer viajar a Bale desde Madrid «sin haber hecho un solo entrenamiento con el grupo».
«Está lesionado», dijo el preparador francés el miércoles tras el encuentro frente al Valencia al ser cuestionado por esa posibilidad. Zidane, no obstante, aseguró que consultaría con los médicos para conocer la evolución del futbolista y valorar las opciones. Finalmente, decidió que el galés no viajara.
Gareth Bale forma parte de la relación de lesionados del Real Madrid junto a Karim Benzema, el belga Eden Hazard y Marco Asensio. La idea del técnico es contar, al menos, con Bale y Benzema para el duelo contra el Sevilla, en el retorno a la Liga.