El futbolista holandés Kelvin Maynard fue asesinado el pasado miércoles en un tiroteo en Amsterdam. El jugador, de 32 años, estaba en su coche conduciendo por la región de Langbroekdreef cuando se produjo el fatal ataque con arma de fuego.
El periódico neerlandés De Telegraaf publica que se cree que el futbolista intentó escapar de los atacantes conduciendo hacia la estación de bomberos más próxima, pero tras el ataque su vehículo golpeó un edificio y no pudo ser reanimado.
Kelvin Maynard jugaba como defensa en el Alphnese Boys, de la Quinta División holandesa, tras haber defendido los colores de otros equipos como FC Volendam, Kecskemét, FC Emmen, Royal Antwerp, Burton Albion, SV Spakenburg y Quick Boys.