El seleccionador nacional, Luis Enrique Martínez, aseguró estar «muy satisfecho de la actitud de los jugadores», que para él «es clave y vital para conseguir cosas en el futuro» como «dar una imagen potente» que se acerque a la que el equipo quiere dar dentro de la próxima Eurocopa.
«Que una selección inferior gana a la favorita ha sucedido, sucede y sucederá en el futuro. ¿Qué vamos a intentar nosotros?, que no nos pase y dar una imagen potente que nos acerque a lo que queremos dar dentro de la próxima Eurocopa si somos capaces de clasificarnos que yo espero que así sea», afirmó.
En declaraciones difundidas por 'sefutbol.com', el técnico asturiano admitió que después de los dos primeros partidos de la fase de grupos de la Liga de Naciones todos esperaban estar en la fase final, «pero el grupo era muy difícil» y se cometieron «errores».
«No hay ninguna duda, pero si tengo que hacer una valoración general de lo que había visto antes, de los conceptos que hemos trabajado, de las cosas que hemos intentado cambiar y estamos en proceso de cambiarlas, estoy muy satisfecho, muy contento de la actitud de los jugadores, que para mí es clave y vital para conseguir cosas en el futuro», añadió.
Los objetivos ahora son «seguir mejorando» y hacer «partícipes a los jugadores» de este proceso, para «entre todos ser mejores». «Hay rivales potentes como Suecia, que llegó más lejos que nosotros en el anterior mundial -la eliminó Inglaterra- y es una selección de un nivel parecido al nuestro. Como profesional yo no puedo pensar que son inferiores a nosotros, lo tenemos que demostrar dentro de un terreno de juego y eso ya es más complicado», dijo
El seleccionador reconoció estar «superilusionado desde el principio» cuando recibió la llamada del presidente de la Federación, Luis Rubiales, para hacerse cargo de España, algo que siempre había dicho que le gustaría hacer. «Nunca sabes cuándo vas a tener esa oportunidad. Es un cambio grande, pero a mí me gusta, tengo facilidad para adaptarme a las diferentes situaciones que se den y tengo mucho más tiempo para trabajar sin los jugadores en lo que es la preparación de los partidos y la competición», comentó.
Tras recordar momentos ilusionantes de España antes de debutar con ella, como el 12-1 de Malta, y después «realizar un sueño» cuando fue parte del equipo, Luis Enrique opinó que su generación fue «la que no pasó de cuartos en los Mundiales, a veces eliminada de manera inmerecida» porque «el factor suerte no jugó» a su «favor». «Me gustaría pensar que pudimos poner algo para el éxito futuro de las otras generaciones, pero muy contento y satisfecho de lo que hice y de cómo competimos. Cuando uno tiene la sensación de que ha dado todo ningún reproche», concluyó.