Desde hace unos meses, la Penya Arrabal vive un sueño. Habita sobre una nube el histórico club de Santa Catalina, que después de muchos intentos y de una temporada impecable recorre ahora las galerías de la División de Honor juvenil, el último territorio en el que, desde su fundación, todavía no había clavado su bandera rojinegra.
Ultima Hora Esports se adentra en las entrañas de Can Valero para hablar con sus protagonistas y repasar cómo está siendo una temporada especial y en la que el gran reto es que el equipo juvenil de Miguel Soler pueda firmar la permanencia.