Genio y figura, alabado y odiado casi a partes iguales. Así es Jose Mourinho, el entrenador portugués del Manchester United que hace tan solo unas semanas parecía desahuciado de Old Trafford y que este miércoles vio como su equipo le daba la vuelta al marcador, y conseguía derrotar a domicilio a la todopoderosa Juventus de Turín de su compatriota Cristiano Ronaldo.
La noticia deportiva es relevante, pero sin embargo la mayoría de los titulares se los lleva el luso por su actitud fuera de su labor técnica. Tras conseguir la remontada, Mourinho dedicó un feo gesto que no gustó para nada a la grada de la Vecchia Signora.
El entrenador de los diablos rojos se excusó, asegurando que con la mente fría no repetiría ese gesto desafiante, aunque subrayó que el público italiano lo insultó «los 90 minutos».
«Me insultaron durante los 90 minutos y vine aquí para hacer mi trabajo, nada más. No ofendí a nadie, solo hice el gesto que quería escuchar algo más (referido a los insultos)», afirmó Mourinho al acabar el partido en declaraciones a la cadena italiana Sky Sport.
«Si hubiera estado frío no lo habría hecho, pero solo vine para hacer mi trabajo y la gente insultando a mi familia y a la interista, eso no es bueno y reaccioné de esa manera», prosiguió el portugués, considerado como un «enemigo» por la afición juventina a causa de su pasado al mando del histórico rival Inter.
Más allá del gesto, que fastidió a algunos jugadores bianconeri, Mourinho se alegró por la capacidad de su United de rendir a su «máximo nivel» contra una Juventus que el portugués cree superior.
«Nuestro partido fue de alto nivel, jugamos al máximo nivel. No podemos ser mejores que esto. Ganamos contra un equipo que juega con objetivos distintos que los nuestros a todos los niveles. (La victoria fue) una suerte que buscamos, porque hicimos un partido muy positivo», dijo.
Como es natural, esta cuestión tomó una especial relevancia en las redes sociales, con multitud de memes y bromas al respecto.