El Platges de Calvià es el líder en solitario de la Tercera División balear y lo es gracias a su fútbol y al alto nivel de competitividad que exhibe en este arranque de temporada. Hace apenas tres temporadas el presidente Armando Pérez se puso al frente del club con el objetivo de recuperar el espacio que el Platges se merecía en Tercera. Lo hizo y lo hizo muy bien.
Ahora, apenas tres campañas después, el equipo vuelve a ser ese Platges siempre difícil de batir, siempre peleón, siempre rebosante de calidad. «A la noria le quedan muchas vueltas» dice una y otra vez Carlos Martínez, entrenador del equipo y líder indiscutible del vestuario. Con la experiencia que dan 23 años en los banquillos, el técnico mallorquín es el primero que quiere que toda la familia del Platges disfrute el momento, pero desde la calma y la humildad. «El liderato es una anécdota y quiero que todos tengan los pies en el suelo. Queda mucho y si bien esta semana es un premio al buen hacer del equipo, tenemos que tener muy claro que no podemos bajar ni un gramo de intensidad. Sabemos lo que nos cuesta sacar los partidos adelante y por eso mismo no podemos relajarnos ni en el calentamiento», relataba el entrenador del Platges.
El paso de las semanas permite ver a un equipo reconocible en su juego. Entremezcla experiencia, juventud y sobre todo ilusión. Ningún futbolista es profesional, pero su comportamiento dentro y fuera del campo no tiene nada que envidiar a otros equipos de superior categoría. «Sin ese compromiso y sin esa exigencia individual de cada uno sería difícil estar donde estamos», advertía Martínez.
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