La centrocampista mallorquina Patri Guijarro ha sido galardonada por la FIFA con el Balón de Oro a la mejor jugadora y también con la Bota de Oro, tras sus seis tantos y tres asistencias, en el Mundial femenino Sub-20, en el que ella y sus compañeras se han proclamado subcampeonas tras caer ante Japón este viernes.
El dolor de Guijarro por perder la final será un poco menor tras conocerse que ha sido elegida la mejor futbolista del certamen internacional por delante de las campeonas japonesas Saori Takarada (Balón de Plata) y Moeka Minami (Balón de Bronce).
Además, la palmesana, con sus seis goles y tres asistencias, se ha convertido también en la Bota de Oro del Mundial. El añadido de las tres asistencias ha sido clave para desempatar con la inglesa Georgia Stanway (Bota de Plata) pues la jugadora del Manchester City no añadió ningún pase de gol a sus seis tantos.
La jugadora balear de 20 años del FC Barcelona anotó un hat-trick en su estreno en el Mundial ante Paraguay (6-1) y marcó también en el empate ante Estados Unidos (2-2) de la tercera jornada. Además, en las eliminatorias su tanto ante Nigeria (2-1) y ante Francia (1-0) fue el que marcó las diferencias.
Guijarro ya debutó el año pasado con la selección absoluta y ha vuelto a ser convocada para los encuentros de clasificación para el Mundial de 2019 ante Finlandia y Serbia de finales de agosto y principios de septiembre.
Por otro lado, la guardameta inglesa Sandy Maciver ha sido premiada con los Guantes de Oro. Maciver fue clave para que Inglaterra acabase tercera en la tanda de penaltis contra Francia en el duelo por el bronce. El premio al Fair-Play lo ha recibido la selección japonesa.