El juzgado número 8 de Palma ha abierto juicio oral contra el agente de futbolistas Santos Márquez por un supuesto delito de estafa en torno al traspaso del portero Iker Casillas al Oporto.
Se le acusa de haber defraudado a la empresa Mallorca Viva S.L. alrededor de tres millones de euros en comisiones que no abonó por el traspaso del jugador. Según las acusaciones, Santos Márquez había suscrito en el año 2008 con un empresario afincado en Mallorca un contrato para poner en marcha una empresa desde la que realizar actividades de intermediación en el traspaso de futbolistas. Esa empresa financiaba las actividades del agente y, por lo tanto, debería recibir los beneficios de dicha actividad; sin embargo, se le acusa de delitos de estafa y de administración desleal por hacerse con las cantidades que le aportaron y no realizar ninguna entrega de los beneficios que obtenía.
Tanto la Fiscalía como la acusación particular le reclaman penas que llegan hasta los siete años de cárcel por ambos delitos. La causa se enviará ahora a la Audiencia de Palma para que celebre el juicio.