Espanyol 3 - 3 Athletic
Espanyol: Cristian Álvarez; Javi López, Raúl Rodríguez, Héctor Moreno, Capdevila (Tejera, min.74); Forlín, Víctor Sánchez, Rui Fonte (Stuani, min.66), Verdú, Wakaso (Víctor Álvarez, min.82) y Longo.
Athletic Club: Iraizoz; Iturraspe, Gurpegi, Amorebieta; Iraola, Susaeta, Iñigo Pérez (San José, min.41), De Marcos (Ibai, min.46); Muniaín, Isma López (Llorente, min.69) y Aduriz.
Goles: 1-0, min.18: Javi López; 2-0, min.43: Verdú; 2-1, min.55: Aduriz; 2-2, min.72: Llorente; 3-2, min.80: Longo; 3-3, min.81: Aduriz.
Árbitro: Pérez Montero (comité andaluz). Expulsó al entrenador del Espanyol Mauricio Pochettino (min.45) y a Longo por doble amonestación.
Fernando Llorente marcó en el primer balón que tocó en esta Liga y así de mal le sentó la presencia del internacional del Athletic Club al Espanyol, que mandaba por 2-0 al descanso con goles de Javi López y Verdú pero que se topó con la pegada monumental del equipo vasco en la segunda mitad (3-3).
Antes del tanto de Llorente, Aduriz preparó el camino en el 55 (2-1). Sin embargo, después de la igualada el Espanyol reaccionó con Longo (3-2), expulsado en la celebración, y volvió a ceder el 3-3. De nuevo, Aduriz. Un choque de locos. Hasta Pochettino, que sumó su primer punto en la 2012-13, acabó expulsado.
Marcelo Bielsa empezó con una defensa de cuatro pero rápidamente cambió a tres. Que el Athletic iniciara el partido como el conjunto más goleado de Primera, con nueve dianas, no le acomplejó. Eso sí, el entrenador argentino le asignó a Iñigo Pérez la tarea de asfixiar a Joan Verdú, cerebro de los pericos. Buscaba desmontar al Espanyol.
La acumulación de futbolistas en la medular del 'Loco' frenó la circulación y limitó la posesión y el protagonismo blanquiazul. Y Muniaín, eléctrico e impredecible, ponía el ritmo y la presión arriba. La fórmula funcionó, y más ante un rival que necesitaba ganar tras tres derrotas seguidas, hasta el minuto 18.
Verdú se liberó de su marca y asistió a Javi López. El lateral derecho, cuya incorporación al ataque sorprendió a la zaga vasca, definió con clase para poner el 1-0. Iraizoz, experico, no pudo detener el tiro cruzado. Bielsa no cambió el planteamiento ni un ápice: mantuvo los tres defensas y la presión arriba. Sin miedo.
Aduriz pareció darle la razón al enviar, en el 28, un balón al larguero en un córner. Pero fue el único aviso de un bloque espeso.
El Espanyol tenía a su favor el marcador y Longo: en el minuto 40, solo ante el meta, recibió un pase perfecto por alto de Rui Fonte, lo bajó con suavidad, regateó a Iraizoz y falló el control final.
No fue el último intento del Espanyol ante un Athletic que ya esperaba la media parte. Faltaba otro, esta vez el del 2-0. Longo se resarció de su error anterior. El italiano, tras una jugada personal, estrelló el balón en el meta, aunque controló el rechace y le cedió el balón a Verdú. El catalán empujó el segundo en el 43.
Ningún técnico modificó su planteamiento en el descanso. El único cambio fue la entrada de Ibai por De Marcos y, precisamente, de las botas del primero salió el 2-1 a los tres minutos tras la reanudación. El joven delantero sacó una falta que Aduriz remató de cabeza, picado y con fuerza. Su potencia no encontró oposición.
El Athletic, ya muy crecido, dio con la tecla para inquietar al Espanyol. El juego aéreo, clásica especialidad vasca, estuvo a punto de provocar el empate en dos ocasiones consecutivas en el 60. En una de ellas, el remate de Ibai estaba virtualmente dentro, pero Rui Fonte metió el pie en el último instante.
A falta de media hora, nadie especulaba. Toda la artillería estaba en el césped: entraba Stuani por el Espanyol y Llorente por el Athletic. El internacional se estrenaba esta temporada y el primer balón que tocó fue gol. El '9' le ganó la espalda a los centrales y batió a Cristian Álvarez con un tiro raso y cruzado.
Llorente no sólo consiguió el empate a dos en el 72, sino que dinamizó todo el ataque vasco. El trabajo para la defensa de Mauricio Pochettino se multiplicaba y las ocasiones para los de Bielsa también crecieron. Los 'leones' mandaban claramente en Cornellá-El Prat ante un Espanyol metido en su área.
Cuando el efecto Llorente empezó a disiparse, los catalanes recuperaron protagonismo. Y el partido enloqueció en dos minutos. Primero apareció Wakaso, con un pase visionario desde el círculo central a Longo, que superó al portero. El italiano, sin embargo, fue expulsado al recibir la segunda amarilla.
Entre la alegría del 3-2 y el enfado por jugar con diez, Aduriz, justo en la siguiente jugada, firmó un gol tremendo desde la frontal. La volea del punta empataba el choque, que vivió una recta final con todo: expulsión de Pochettino y polémica por una falta en la frontal de Amorebieta que el árbitro sancionó con amarilla.