Sporting 1 ? 0 Espanyol
Sporting: Juan Pablo, Lora, Botía, Iván Hernández, José Angel, Nacho Cases, Eguren, De las Cuevas (Bilic m.85), André Castro (Nacho Novo m.64), Diego Castro y Barral (Sangoy m.77).
Espanyol: Kameni, Galán, Amat, Raúl Rodríguez, Chica, Verdú, Iván Alonso (Alvaro m.77), Javi López (Marquez m.45), Luis García (Rui Fonte m.82), Callejón y Osvaldo.
Gol: 1-0. Min 70: Nacho Novo.
Àrbitro: Rubinos Pérez.Mostro tarjetas amarillas a Raúl (m.11), Javi López (m.21), Iván Alonso (m.50), Marquez (53), Amat (m.58), Botía (m.59), Verdú m.86)
Un solitario tanto de Nacho Novo dio al Sporting la victoria sobre el Espanyol, con la que se acerca a la permanencia, y que le sirvió para homenajear a su técnico, Manolo Preciado, que cuatro días antes perdió a su padre, atropellado en El Astillero (Cantabria).
En un encuentro marcado por la fuerte carga emotiva alrededor del técnico, al que sus jugadores fueron a abrazar tras conseguir Novo el tanto de la victoria, el Sporting volvió a mostrar su eficacia como local, la que le ha permitido mantenerse en la zona media en la segunda vuelta de la Liga.
Sporting y Espanyol afrontaban este encuentro con objetivos muy diferentes, pero ambos importantes para sus aspiraciones: los locales, asegurarse la permanencia en la Primera división y los catalanes, seguir teniendo opciones de clasificarse para una competición europea, lo que deparó una primera parte entretenida y con ocasiones para los dos equipos.
El primero en acercarse al área rival fue el Sporting cuando ni siquiera había transcurrido el primer minuto de juego en un centro de José Angel que remató Barral y que hizo que el balón saliese por encima de la portería de Kameni.
La réplica visitante no tardó en llegar en un contraataque de Osvaldo que cayó en el área y que le llevó a reclamar penalti.
El Espanyol dejó claro que venía a por el partido y dos minutos después Luis García disparó desde el borde del área obligando a Juan Pablo a desviar a córner, cuyo lanzamiento remató de cabeza Javi López, libre de marcaje, pero el balón sale muy alto.
El conjunto barcelonés dominó el juego y suyas fueron las llegadas más claras merced a balones largos a la espalda de la defensa rojiblanca para Osvaldo o Iván Alonso y también con cambios de banda, pero la defensa local estuvo siempre muy atenta y resolvió con cierto, aunque a veces también con apuros.
Transcurrida media hora, el Sporting logró una combinación de paredes en la que Eguren se quedó sólo dentro del área de Kameni, pero su disparo salió demasiado cruzado, desaprovechando la mejor oportunidad hasta el momento por parte de los dos equipos.
Las siguientes acciones locales fueron disparos desde fuera del área que Kameni resolvió sin ningún problema mientras que el Espanyol cedió un tanto en su empuje, aunque Callejón e Iván Alonso lo intentaron, el primero desde fuera del área y el segundo por alto pero en ambos casos Juan Pablo se impuso.
Al borde del descanso, el Sporting tuvo su mejor ocasión en una jugada personal de Diego Castro, que dribló a su par y casi desde la línea de fondo dispara, sorprendiendo a Kameni que tocó lo justo, y Galán acabó despejando el peligro.
Los primeros 20 minutos de la segunda parte fueron de dominio visitante si bien sin crear peligro, mientras que el Sporting estaba sin ideas y más preocupado de defender que de atacar y el resultado fue que el juego se resintió de cara al espectador.
Con el balón en poder del Espanyol el Sporting corría más de lo necesario, pero no interceptaba la pelota, de lo que tampoco se aprovechó el conjunto barcelonés, por lo que el juego se desarrollaba la mayor parte del tiempo en el centro del campo.
Sin embargo, con tanta posesión el Espanyol dispuso de una clara ocasión en un centro de Chica que remató de cabeza Osvaldo, completamente solo, pero Juan Pablo tuvo los reflejos suficientes para rechazar y Lora acabó despejando una clara ocasión visitante.
Preciado decidió hacer un cambio dando entrada a Nacho Novo por un Andrés Castro que se había desgastado mucho ya que era de los primeros en defender la salida del balón desde la defensa españolista.
Este cambio resultó decisivo porque fue Novo en uno de los primeros balones que tocó el que permitió adelantar a su equipo en el marcador.
El gol rojiblanco llegó en una jugada de mala suerte por parte de la defensa del Espanyol ya que Raúl Rodríguez despejó hacia atrás un centro sin aparente peligro y el balón llegó a Nacho Novo que tocó lo suficiente para despistar a Kameni.
La totalidad de jugadores del Sporting corrieron hacia el banquillo para dedicarle el gol a Preciado algo que le habían prometido como homenaje a su padre y además por la importancia de los tres puntos en juego ya que dejan al equipo con pie y medio en Primera división para la próxima temporada a falta de cinco jornadas para el final.
El Molinón estalló en júbilo con el pitido final y los jugadores y técnicos formaron una piña en el centro del campo ya que la semana había sido muy difícil y emotiva.