Los partidos de la jornada decimoséptima se jugarán el domingo 2, según lo previsto, después de que la Sala de lo Social de la Audiencia Nacional se haya declarado incompetente para decidir sobre la suspensión de los encuentros, al considerar que la demanda presentada por Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) adolecía de un defecto de forma, han informado fuentes jurídicas.
Los magistrados Ricardo Bodas -presidente de la Sala y ponente de la resolución- Manuel Poves y Enrique De No Alonso-Misol entienden que el calendario de la competición fue aprobado por la Real Federación Española de Fútbol por delegación del Consejo Superior de Deportes.
Aplicar la medida cautelar de suspensión «alteraría» la aprobación del calendario, un acto administrativo cuyo conocimiento corresponde a la jusrisdicción cotencioso-administrativa y no social, dicen los magistrados.
Esto provoca que la Sala no sea competente para aplicar la medida cautelar de suspensión de los partidos. Sucede que tanto mañana 31 de diciembre como el 1 son días inhábiles de forma que aunque la demanda se presentara ante la instancia correcta esta no podría decidir a tiempo.
El balón, en el tejado de la Audiencia
La Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) defendió ayer en la Sala de lo Social de la Audiencia Nacional su decisión de que no se disputen partidos el próximo 2 de enero, como tiene programado la Liga de Fútbol Profesional (LFP).
El presidente de la AFE, Luis Rubiales, y el de la LFP, José Luis Astiazarán, comparecieron en la mencionada Sala, en una vista pública, para defender sus posturas, acompañados de sus representantes y abogados.
La AFE, que vela por los derechos de los jugadores profesionales, denuncia un incumplimiento del convenio colectivo firmado en julio de 2008, que reflejaba el día 2 de enero como fecha de descanso para los futbolistas, y en el que la LFP ha programado cinco partidos de Primera División y diez de Segunda.
La propia AFE solicitó formalmente la suspensión cautelar de la jornada ante la imposibilidad, por el momento, de que se alcance un acuerdo entre los litigantes.
El organismo «no pide la suspensión o el aplazamiento de la jornada, sino el que no haya partidos el día 2 de enero», y además ha denunciado «una vulneración en la elaboración del calendario» al no haber contado con su opinión para realizarlo.
Las fechas, un problema
Y el problema llega por la falta de fechas libres, lo que obligaría a que las jornadas se corrieran y a que la última se disputara el 12 de junio, las fecha posible más cercana. Estaba previsto que la Liga concluyera el 22 de mayo. Es decir, pasarían 21 días entre la penúltima fecha y la aplazada por el conflicto.
La final de la Liga de Campeones europea se disputa en Londres el 28 de mayo y el primer fin de semana de junio es fecha FIFA. Esos días podrían ser aprovechados por la selección española, campeona del mundo, para hacer una gira por Asia.
El 11 de junio comienza el Europeo sub 21, la Copa de Oro de la Concacaf se disputa del 5 al 25 de junio y la Copa América se juega del 1 al 24 de julio en Argentina y que conlleva también un plazo mayor de vacaciones y de concentración de los jugadores con las selecciones. Pero un final de Liga el 12 de junio supondría que no se podrían respetar los 30 días de vacaciones de verano estipulados en el convenio. Por su parte, la Liga ha pedido que se desestime el recurso de la AFE, alegando que «la programación del calendario se conocía desde el mes de mayo y se ratificó en junio». También negó que el calendario se realizara de forma unilateral y precisó que «sí se contó» con el sindicato de futbolistas.