Mientras el Mallorca rastrea el mercado en busca de refuerzos, algunos de los jugadores que están su punto de mira no tienen problemas para airear publicamente sus preferencias y allanarle el camino al club de cara a una posible contratación. Es el caso del delantero canario Rubén Castro, que ayer reconocía a este periodico que estaría encantado de jugar en la SAD balear a partir de la próxima temporada: «Si el Deportivo, como parece, no cuenta conmigo, vería con muy buenos ojos jugar allí. Me gusta el club y me atrae la idea de vivir en la isla», aseguró.
Rubén Castro (Las Palmas, 1981), que fue el máximo goleador de Segunda división en la temporada 2003-04, acaba de cerrar un ejercicio especialmente aciago para sus intereses -en 24 partidos de Liga marcó 3 goles- y el Deportivo le está buscando una nueva ubicación para la próxima campaña, después de que Joaquín Caparrós le señalara como uno de los hombres más prescindibles de su nuevo vestuario. Ante eso, la intención de la entidad gallega es utilizarlo como moneda de cambio en alguna operación, pero el jugador, que tiene contrato hasta el año 2011, sólo lo aceptaría bajo unas condiciones muy concretas.
En cualquier caso, Lendoiro estaría dispuesto a abrirle la puerta por una cantidad simbólica y si el Mallorca se decide finalmente a contratarlo echaría mano de sus magníficas relaciones con el club herculino para adquirir sus servicios a un bajo precio. Por otra parte, el Deportivo sigue buscando un meta de garantías para el curso que viene y desde Galicia se especula con la posibilidad de que el presidente deportivista incluya al ariete en alguna de sus posibles ofertas por Miquel Àngel Moyà.