El Barcelona busca ante el Sevilla, el equipo menos goleado de la liga, su undécima victoria consecutiva en partido oficial para igualar la mejor racha de su historia, conseguida en la temporada 1955-56 con el húngaro Franz Platko como técnico azulgrana.
El conjunto catalán, que lidera la clasificación junto a Osasuna, ha ganado los siete últimos partidos de Liga (contra Osasuna, la Real Sociedad, el Getafe, el Málaga, el Real Madrid, el Racing y el Villarreal), en los que ha marcado 22 goles y encajado sólo dos.
A esta racha de triunfos hay que sumar otros tres consecutivos en la Liga de Campeones (ante Panathinaikos, Werder Bremen y Udinese). El Barça, máximo goleador del campeonato (36 tantos en 14 jornadas) recibirá al equipo menos goleado, que sólo ha encajado ocho goles, con las bajas por sanción de Márquez y Deco y las de los lesionados Motta, Van Bommel y Xavi.
Tras el descanso en la Liga de Campeones, Valdés, volverá a la portería para mandar a una defensa en la que Oleguer abandonará el lateral derecho para ocupar el puesto de Márquez como pareja de Puyol en el eje de la zaga.
En los laterales, Rijkaard podría dar entrada a Belletti, que ocuparía la plaza de Oleguer en la derecha, y a Silvinho por banda izquierda. Edmilson volverá a ocupar el pivote defensivo, pero esta vez serán Gabri e Iniesta los volantes, ante las ausencias de Deco y el lesionado Motta, que fue el recambio de Xavi ante el Villarreal. En ataque, el habitual tridente formado por Messi en la banda derecha, Ronaldinho en la izquierda y Etoo como punta de lanza.
El Sevilla, por su parte, intentará en Barcelona retornar a la zona europea de la clasificación (aunque no depende de sí mismo para ello), después del tropiezo de la semana pasada con el Deportivo, que interrumpió una racha de ocho partidos sin perder.
El pinchazo ante los gallegos descendió al Sevilla del cuarto puesto al octavo con 23 puntos y los sevillistas, que fuera de casa sólo han encajado cinco tantos, suman seis victorias, cinco empates y tres derrotas.
Salvo incidencias de última hora el delantero argentino Saviola, cedido por el Barcelona al Sevilla, podría reencontrarse con su afición, ya que no hay cláusula alguna que le impida jugar contra el conjunto barcelonés.
Por otro lado, Juan Ramón López Caro ha tenido una semana para lavarle la cara al Real Madrid, que está a seis puntos del Barcelona. No lo tendrá fácil. Apenas cuatro sesiones de entrenamiento con toda la plantilla debido al compromiso contra el Olympiacos en la Liga de Campeones.
Sin embargo, desde el primer día ha dejado claras varias cosas. No renunciará a las bandas, su esquema básico es el 4-2-3-1 y sobre todo con vocación ofensiva, orden y trabajo en el centro del campo. Eso es lo que se ha cansado de repetir en los entrenamientos desde que se hizo cargo del equipo junto a trabajo físico en busca de que los jugadores recuperen la chispa perdida en las últimas semanas.