EFE|CÀDIZ
El uruguayo Víctor Espárrago consiguió en su segunda etapa como
entrenador del Cádiz el retorno del equipo de la «Tacita de plata»
a la categoría de oro del fútbol español trece años después. Tras
seis temporadas sin sentarse en el banquillo, el entrenador charrúa
regresó como técnico del conjunto cadista por sólo un año, y con el
objetivo de mantener o superar la séptima posición lograda en la
campaña anterior con José González como técnico.
La trayectoria del conjunto amarillo superó con creces todas las previsiones, ya que se mantuvo en la zona alta y también en el primer puesto en buena parte de la competición, con el balance final de 21 victorias, 13 empates y 8 derrotas. Espárrago, nacido el 6 de octubre de 1944 en Montevideo, empezó a jugar al fútbol en el equipo juvenil del club Nacional de Montevideo del que saltó al primer equipo, en el que permaneció hasta que se trasladó a España contratado por el Sevilla, y más tarde pasó al Recreativo de Huelva.
Espárrago fue en su época de futbolista campeón de la Copa Libertadores de América y la Intercontinental, con el Nacional de Montevideo -equipo con el que llegó a ganar seis títulos de liga- e integró además la selección uruguaya que ocupó el cuarto lugar en el Mundial de México 70, y fue además 67 veces internacional con su país y marcó un total de 18 goles. En 1982, el uruguayo dejó de jugar y dirigió por unos meses al Nacional, para radicarse posteriormente en España donde estuvo al frente de varios equipos.