Jesús Gil no mejora. El estado del máximo accionista del Atlético de Madrid, que permanece ingresado en la clínica Cemtro de Madrid tras sufrir un infarto cerebral, sigue siendo de extrema gravedad, según el parte médico. Según la nota, continúa ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) con ventilación mecánica y sedación profunda, mostrando signos de inestabilidad neurológica. El entrenador del equipo rojiblanco, Gregorio Manzano, ha manifestado su esperanza de que su situación sea «reversible».
Gil, de 71 años, se encontraba en su finca de Valdeolivas, cuando sufrió un accidente cerebrovascular el pasado domingo. Ingresó de urgencia a las 13:00 horas en el hospital Nuestra Señora del Prado, donde se le diagnosticó el episodio. Por expreso deseo de la familia, fue trasladado a la Clínica Cemtro de Madrid. Los médicos ratificaron el diagnóstico y procedieron a su ingreso advirtiendo que eran cruciales las primeras 48 horas. El ex presidente rojiblanco no está teniendo un buen progreso.
El nivel de consciencia, que en un principio era de un 40 por ciento, disminuyó. Además fuentes sanitarias indicaron que tenía la parte derecha paralizada. Desde hace días Gil necesita ventilación mecánica. El parte médico difundido ayer apunta a signos de inestabilidad neurológica y a que continúa en estado de «extrema gravedad». La familia ha declarado que ahora sólo esperan un milagro.