El estadio de Montjuïc, escenario de los partidos como local del Espanyol, se ha convertido en una referencia en los dos últimos títulos de Liga logrados por el Valencia ya que tras la visita al recinto catalán en ambos campeonatos la trayectoria valencianista fue sobresaliente. La diferencia entre un partido y otro estriba en el resultado, ya que en la temporada 2001-2002 el Valencia venció por 2-3, mientras que en la presente campaña perdió por 2-1, si bien, en ambos casos, el partido en Montjuic fue un punto de inflexión en el camino hacia el título liguero.
Así, hace dos temporadas el Valencia se presentó en Montjuic en una situación casi dramática, ya que en el caso de una derrota Rafa Benítez se había barajado la posibilidad de que dejase de dirigir al equipo debido a la marcha irregular en el campeonato. Era la jornada decimoséptima del torneo. La pobre imagen del equipo y las derrotas sufridas en sus visitas a la Real Sociedad y el Deportivo, así como los empates en casa frente a Tenerife y Mallorca, significaron que el partido ante el Espanyol cobrase una dimensión especial. De hecho, la situación empeoró en la primera parte de aquel partido, después de que el Valencia se retirase a los vestuarios con un 2-0 en contra que hacía presagiar lo peor. Sin embargo, en la segunda parte se produjo una reacción que, quizá, fue decisiva para la historia del club de Mestalla.
Dos goles de Francisco Joaquín Pérez 'Rufete' y otro del rumano Adrian Ilie sirvieron para remontar el marcador (2-3) y para empezar a protagonizar una trayectoria de liga con contadas derrotas que le llevaron a conseguir el título del torneo en la penúltima jornada.
En la presente Liga la visita a Montjuic fue más tardía, en la vigésimo sexta jornada, y menos dramática pero casi igual de significativa, porque desde entonces el equipo de Rafa Benítez no ha perdido, al lograr ocho victorias y dos empates en las diez jornadas siguientes.
El Valencia afrontaba aquel partido 'tocado' anímicamente, tras ver como se le escapaba, dos jornadas antes, la victoria del Santiago Bernabéu ante el Real Madrid en el último minuto de partido con un polémico penalti y perder, a continuación, ante el Barcelona.
En un partido disputado con nieve, el Valencia encadenaba ante el Espanyol su segunda derrota consecutiva, tras la ya mencionada frente al Barcelona en Mestalla (0-1), y quedaba a ocho puntos del liderato del Real Madrid. Dos goles de Raúl Tamudo acabaron con el Valencia en aquel partido (2-1) en una jornada que parecía que había sido definitiva para la suerte del campeonato, después de que el Real Madrid alcanzase una distancia en la clasificación que parecía insalvable. A partir de ese momento, el conjunto valencianista encadenó seis triunfos seguidos, ante el Deportivo, Mallorca y Murcia en Mestalla y Celta, Racing y Zaragoza a domicilio, que le llevó a recuperar el liderato de la competición.
César Toldrà