El entrenador del Barcelona, Louis van Gaal, dijo que se considera el técnico «más adecuado» para dirigir el actual equipo del Barcelona, a la vez que opinó que «no sería muy inteligente» optar en estos momentos por su destitución. «Yo estoy convencido de que soy el entrenador para el Barcelona, más adecuado que otro, porque yo conozco a esta plantilla. Y si ellos (la junta directiva) deciden cambiar a este entrenador, esto no sería muy inteligente. Pero ellos pueden hacerlo», señaló el técnico azulgrana.
Van Gaal hizo esas declaraciones en una larga rueda de prensa en la que se habló más de la crisis que atraviesa el equipo catalán que del partido en que debe enfrentarse al Newcastle inglés en la Liga de Campeones. La palabra destitución planeó por primera vez en la segunda etapa de Van Gaal en el Barcelona y el entrenador se encargó de recordar: «Si fuera destituido sería por primera vez (en su carrera como técnico), lo que para mí sería muy malo».
El holandés mostró un sentimiento contradictorio al referirse a si cree que podría ser destituido, ya que a la primera cuestión directa al respecto contestó que «es una pregunta que debe hacerse a Xavier Pérez Farguell (el director general del club) y la junta directiva», pero posteriormente fue contundente al señalar que está «convencido» de que cuenta con el «apoyo» del presidente, Joan Gaspart, a pesar de los resultados adversos que ha conseguido el equipo en los últimso partidos.
Por lo que respecta a la actualidad deportiva el equipos afronta en el Camp Nou uno de los encuentros que pueden marcar su futuro inmediato, ya que si es incapaz de solventar su compromiso europeo ante el Newcastle United, el mundo se les puede venir abajo a los azulgrana y se adivinan medidas a muy corto plazo. El equipo no funciona, Louis van Gaal está tan cuestionado como Joan Gaspart y los rumores sobre cambios inmediatos se repiten con insistencia.
Si los azulgrana no resuelven, se abrirá la caja de los truenos. Vendrán nuevos fichajes, se impondrá otro rumbo y seguramente a Van Gaal, el entrenador contratado más por su eficacia, le quedarán menos horas en el banquillo barcelonista ya que parece ser el punto de inflexión por parte de la directiva.