El Al-Hilal Saudi es el mejor club de Asia. Tiene su sede en Riad, capital de Arabia Saudita. Desde su fundación en 1957 ha ganado 48 títulos y desde esta semana tiene una clara vinculación con Mallorca porque ha incorporado al entrenador Toni Amor (Palma, 1976) y que después de tres temporadas en el Al Wasl Sport Club ha aceptado la oferta que le ha hecho llegar un club bañado en petrodólares y que más jugadores aporta a la selección de Arabia Saudí. Esta nueva etapa supone un paso de gigante en la carrera profesional de Toni Amor que después de su paso por la academia del Al Wasl tiene ahora la oportunidad de entrenar en la principal Liga del país y de dirigir también a un equipo que disputa la Champions League de Asia. Trabajará codo con codo con Sami Al Jaber, primer entrenador y leyenda del fútbol árabe. En estos momentos el nuevo equipo de Toni se encuentra en octavos de final de la Champions donde uno de sus rivales es el equipo de Raúl González. También lucha por ganar la Copa del Rey y por lo tanto en apenas un mes todos los objetivos están en juego. «Fue todo muy rápido y el interés que tuvo el club en incorporarme se consolidó en un contrato y aquí estoy, aportando mi grano de arena en cada entrenamiento para conseguir cosas importantes». El propietario del Al-Hilal es el príncipe de Arabia Saudí, Abdulrahman Bin Musaad, y su estadio tiene una capacidad para cerca de 40.000 espectadores. Sin duda se trata de un desafío absoluto para un entrenador que se formó en la cantera balear. Toni Amor emprendió el verano de 2011 viaje a Dubai para incorporarse a la disciplina del conjunto del Al Wasl. Su trabajo se centró en el fútbol formativo donde trabajó con la cantera con el fin de dotar de competitividad a los jóvenes de ese club y crear jugadores con opciones de defender al primer equipo. El resultado fue tan bueno que esta misma campaña dirigió el equipo filial, pero la oferta del Al-Hilal ha sido demasiado tentadora desde el punto de vista profesional y personal y el técnico ha decidido cambiar de aires.
Amor, que en la Isla ha entrenado al Arenal, San Francisco, Atlètic Balears y ha sido segundo de Jaume Bauçà en el Mallorca B, decidió de la mano de su representante, Ronnie Woiski, dar el salto a un fútbol desconocido y a un país por descubrir y no le ha ido nada mal porque en apenas tres años se ha convertido en uno de los entrenadores jóvenes más reconocidos hasta el punto de que le ha fichado el equivalente al Real Madrid o al Barcelona en España, tanto por seguidores como por su nivel de competitividad. Desde Arabia Saudí observa con tristeza lo que ocurre en el Mallorca. «Es una vergüenza lo que está pasando y se está pagando una mala gestión deportiva. Es un desastre», señaló a Ultima Hora el entrenador Toni Amor.